27 enero 2010

Barranquilla: PARASHAT BESHALAJ, SHABAT SHIRA Y TU BISHVAT - TIEMPO DE ALEGRIA Y RENOVACIÒN

PARASHAT BESHALAJ, SHABAT SHIRA Y TU BISHVAT - TIEMPO DE ALEGRIA Y RENOVACIÒN
de Asher Amram Ben Avraham Avinu - Wednesday, 27 de January de 2010, 19:09
 

בס"ד

Beshalaj - Shabát Shirá 
 
Parashá Beshalaj - Al dejar salir
Libro Shemot / Éxodo (13:17 a 17:16)
Haftará en Shoftim/ Jueces 4:4 – 5:31.

 

Este Envio de Torah Semanal esta : Dedicado a la Refua shelema
 ( curación completa) de:
 
MARAN HAGAON HARAV YOSEF SHOLOM (BEN JAIA MUSHA) ELYASHIV SHLIT"A.-
Sr. Alberto Girado Lobo 
Sr.Sixto hijo de Juana
Sr. Fabio Camacho
Matitiahu Ben Katerine
Sr.Alfonso Rojas
Avraham Moshe ben Miriam Toba
Netanel Ben Sara
Sebastián Ben Rujama
Sr.Zevulón ben Alicia
Sr Aaron Ben Sara
David Gabriel Ben Farida
Sr Kalman Shamai Ben Dina
Sr Iosef Ben Avraham Avinu
 
Sra Aura Ester bat Jana
Sra Maria Bat Lola
Sra Aylin Bat Olga
Sra. Leah Zehara bat Miriam Sasha
Sra.Rujama Bat Clemencia
Sra.Rina bat Clemencia
Sra.Clemencia bat Tana
Sra.Mayo Bat Tana
Sra.Etelvina bat Tana
Sra Jaya Bat Shira
Sra Maria Barrerio
Sra Mijal ruby Bat Marlen
Sra Hanna Bat Malka
Paula Tzofiah Bat Leah
 
Leiluy Nishmatam ( Elevación de las  Almas) de:
HaRab Jaim  David Ben Shraga Fievel Zukervar  ZT´´L
Harab Amram Horowitz ZT''L
Sr. Miguiel Avila Z''L
Carlos Ben Maria  Z''L
Sr Julio Wasserman Z''L
Iyov Ben Avraham Z''L
 
Hatzlaja beKol Maase Yadenu:
 
Asher Amram  Ben Avraham

* Si desea dedicar este envio de Torah, por la pronta recuparacion de un familiar o un amigo o en recuerdo del alma de algun ser querido, por favor envienos un correo a
comhebrea@gmail.comcon el nombre de la persona y el nombre de su Madre.
 
Horario del Encendido de Velas para SHABAT en Bogotà,Barranquilla y Cali ,Colombia
 
Bogotá:
Fecha Hora    
Viernes, 29 Enero, 2010 Encendido de velas a las: 17:49
Shabat, 30 Enero, 2010 Shabat concluye: 18:39

 

Barranquilla:

Fecha Hora    
Viernes, 29 Enero, 2010 Encendido de velas a las: 17:43
Shabat, 30 Enero, 2010 Shabat concluye: 18:35

 

Cali:

Fecha Hora    
Viernes, 29 Enero, 2010 Encendido de velas a las: 18:00
Shabat, 30 Enero, 2010 Shabat concluye: 18:51

  
Honrar al Shabat encendiendo velas 18 minutos antes de la puesta del sol del viernes.Este mandamiento único, confiado a la mujer judía, es rico en significados y contenidos.
Es muy importante saber la hora exacta del encendido de velas, ya que bajo ninguna circunstancia esta permitido encenderlas después de la puesta del sol

 

ESTE SHABAT ES DENOMINADO SHABAT SHIRA ( EL SHABAT DEL CANTO)

 

La canción cantada junto al mar fue vocalizada en el momento adecuado; en el preciso instante en que todas las Huestes Celestiales y toda criatura terrenal estaba colmada de alabanzas hacia Di-s

 
Shabát Shirá - la Canción de toda la Creación     
 
El Shabat en el cual se lee la sección de Beshaláj (Éxodo 13:17 17:16) se denomina Shabat Shirá - Shabat del Cántico - porque en ella encontramos la shirá, el canto, que Israel entonó luego de la partición del Iam Suf (el Mar Rojo).

Además de la shirá, la sección contiene varios otros temas: el Éxodo de Egipto, el milagro de la partición del mar, los estatutos y leyes dados al acampar en Mará, el milagro de la caída del maná, la aparición del manantial que proveyó de agua al pueblo, y la guerra contra Amalék. No obstante, el tema de la shirá fue el que el pueblo judío eligió especialmente para designar a este Shabat, pues ella posee la particularidad de que cada vez que el pueblo de Israel la recita en el curso de las generaciones, es como si lo hiciera por primera vez. ¿A qué se debe esto?
 
Todos los otros pasajes de la Torá fueron dichos por Di-s mientras Israel escuchaba, pero esta shirá la entonaba Israel, y Di-s, junto a todas Sus huestes celestiales, escuchaban lo que aquellos decían. En ese momento el alma de Israel se elevó al máximo nivel de exaltación, y su corazón se transformó en un manantial del cual fluía Torá. El sonido de su voz era como el sonido de Di-s. Y más aún, este cántico de Torá que manaba desde su interior precedió a la Torá que escucharon del Todopoderoso en el Monte Sinaí.
 
La fuerza de la shirá que entonaron en aquel entonces hizo que el júbilo y la canción se implantaran en los corazones judíos hasta el fin de las generaciones, y toda vez que el pueblo es librado de sus enemigos y rescatado de sus tribulaciones, su corazón se inspira para entonar cánticos y alabanzas a Di-s, Su salvador, en vez de vanagloriarse en razón de su propia perseverancia. La shirá comienza con las palabras: "...y hablaron diciendo" (Éxodo 15:1); es decir, la canción que "hablaron" entonces les posibilitó continuar "diciendo" en todas las generaciones.
 
El Pueblo Judío entonó esta shirá motivado por una fe plena, y no simplemente a causa del asombro ante tantos milagros y maravillas, pues la impresión momentánea es transitoria, en tanto que la fe y la creencia quedan grabadas en el corazón y perduran por siempre. El pueblo de Israel no comenzó a cantar sino después de haber reconocido que el cautiverio y la aflicción sufridos, y la prueba y purificación a la que sería sometido en el futuro, son, todas, señales del eterno amor y benevolencia de Di-s hacia ellos. Israel comprendió en ese momento que no existe alegría ni vida genuina si ésta no se basa en la fe en Di-s, como expresan los versículos: ...y júbilo para los rectos de corazón (Salmos 97:11); y el justo por su fe vivirá (Jabakuk 2:4). Asimismo encontramos en las palabras de la shirá: Y creyeron en Di-s y en Moshé, Su servidor... entonces Moshé y los Hijos de Israel entonaron este cántico... (Éxodo 14:31 15:1).
 
La shirá cantada junto al mar fue vocalizada en el momento adecuado; en el preciso instante en que todas las Huestes Celestiales y toda criatura terrenal estaba colmada de alabanzas hacia Di-s, expresando Su grandeza y dominio. Fue entonces, cuando la gloria de Su soberanía saturó el mundo, que Israel irrumpió en cántico, como está escrito: Entonces Moshé y los Hijos de Israel entonaron... (íd.). "Entonces" - en ese preciso instante, ni antes ni después.

Si hubieran demorado su shirá, el resto del universo no habría respondido con su propio canto, pues la impresión de lo acontecido ya se habría disipado. Si hubieran entonado su shirá antes, cuando abandonaron Egipto, se les habría dicho: "Agradeced al Faraón por haberos liberado, pero tened en cuenta que él, sus ejércitos, y todo su poderío, aún existen y vosotros estáis perdidos en el desierto". Pero ahora que todos los caballos, carros, jinetes y ejércitos del Faraón fueron ahogados en el mar y había sido despojado de su fuerza y orgullo, éste era el momento apropiado para la shirá; como expresa el versículo: Cantaré a Di-s pues El es grandemente ensalzado, arrojó al mar al caballo y a su jinete (íd. 15:2). ...Di-s reinará por siempre jamás (íd. 15:18).
 
La canción de toda la creación, de boca de Israel
 
Cantaré a Di-s - sólo a Él, ¡porque no hay otro fuera de Él!

Pues Él es grandemente ensalzado - sólo Él es exaltado con desmesurado orgullo. No así el hombre, cuyo orgullo lo degrada. Aunque pretenda elevarse a los cielos, termina descendiendo al abismo.

"Al caballo" - símbolo de fuerza y poder entre las criaturas de la tierra...

"y a su jinete" - el hombre que se enorgullece por su dominio sobre las fuerzas de la Creación.
 
Pero, ¿quién es el hombre y qué es su orgullo, vano orgullo, frente a la fuerza de una de las creaciones de Di-s, el poder del mar embravecido?

"Arrojó al mar" - El ha arrojado al hombre junto con su orgullo al mar, como quien alza un objeto liviano y lo lanza hacia abajo nuevamente [esto explica las diferentes expresiones utilizadas en hebreo: ramá baiám, literalmente "los levantó en el mar", y iará baiám - "los lanzó (hundió) en el mar"].
 
¿Qué representa la fuerza del mar embravecido, con sus poderosas olas, en la presencia de los amados hijos de Di-s? Aunque las profundidades del océano emergen y hierven amenazando con inundar toda la creación, un mero soplo surge de Sus narices e inmediatamente las aguas se apilaron - como si fueran arena y no agua, y las corrientes que fluían quedaron erectas como una pared - como si fueran bloques de hielo y no hirvientes corrientes de agua.

Las aguas profundas se congelaron en el corazón del mar - las profundidades del mar no se secaron, sino que continuaron fluyendo como lo habían hecho desde la Creación, pero cuando alcanzaban el nivel de los pies de aquellos amados por Di-s, ahí se congelaban, en el corazón del mar.
 
 
- Selección extraída de Nosotros y el tiempo - Sefer Hatodaá. Por el Rabino Eliahu Kitov -
 
(Con la amable autorización de www.Torá.org.ar)
 

 

Shobabim Tat

 

Las semanas en las cuales se lee la parashá Shemot, Vaerá, … hasta Tetzavé, se conocen con el nombre de Shobabim Tat, según la primera letra de la parashá, a saber: Shemot, Vaera, Bo, Beshalaj, Itró, Mishpatim, Truma, Tetzavé. Estos días son días de ayuno, oración, contrición, caridad y tiene la fuerza de hacer "Tikunim" (arreglos necesarios para el alma) hay muchas costumbres y fueron escritos poemas especiales para estos importantes días.

En años normales se acostumbra a ayunar los días lunes y jueves, en Shobabim y en los años intercalados, donde se agrega un mes más – Adar 2 – en Shobabim – Tat. -Shobabim, nos insinúa, Shubu banim- ¡Volved hijos! -Tat, nos recuerda, Teshuvá y Tefilá arrepentimiento y oración) y también Talmud Torá (estudio de la Torá).

De cada parashá podemos aprender un camino a andar:

a. Shemot: Pedir a HaShem por nuestras necesidades, así leemos: "… los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, y clamaron y subió a HaShem su clamor… Y oyó HaShem los quejidos de ellos… y miró HaShem a los hijos de Israel y HaShem supo lo que hay que hacer" (2:23-25).

b. Vaera: Debemos tener conciencia y escuchar el verbo de HaShem… si no nos atendremos a las consecuencias. Moshé, nuestro maestro, no consigue convencer al Faraón para que acate la orden de HaShem… Solo después de la plaga de granizo, reconoce y aclama: "he pecado otra vez, el Eterno es justo y yo y mi pueblo somos los malvados" (2:23-25)

c. Bo: La oración y la fe no basta, en esta parashá somos ordenados a cumplir el precepto de los "Tefilin" (filacterias) "Y será para ti, una señal"

d. Beshalaj: Nuestra oración no se limitará a pedir a HaShem lo que necesitemos, sino hemos de agradecerle a HaShem; Onkelos, explica en "Shiraz hayam" (cánticos al mar) sobre las palabras "cantaré a HaShem", explica: con alabanzas y agradecimiento ante el Creador. Estas "parashiot" nos indican como debemos relacionarnos con HaShem, las siguientes nos conducirán a las buenas relaciones con nuestros semejantes.

e. Itro: En los "Diez mandamientos"… "no matarás" f. Mishpatim: Leyes para el bien de la sociedad, justicia merced y compasión, "No pervertirás el juicio" (23:6) "Cuando encontrares el buey de tu enemigo a su asno extraviado, sin falta se lo harás volver (idem: 24)

g. Truma: Debemos aprender a donar, a dar de lo nuestro.

h. Tetzavé: Como las vestimentas del "Cohen" eran "Iejabod uletifaret" para (honra y hermosura) (28:2) Así, en lo material, deben estar nuestras ropas, pulcras y limpias, sin mancha alguna… en lo espiritual debemos de tratar que nuestro "beged" – neshama – alma, se encuentre limpia y diáfana.

Estas semanas son propicias, para un cambio de clima espiritual… aprovechemos la oportunidad.

Resumen de la Parashá

 El relato de esta parashá comienza señalando que Hashem condujo a los israelitas, a su salida de Egipto, por un camino dentro del desierto hacia el mar Rojo, evitando así atravesar tierra de los filisteos, con ejércitos enemigos y la posibilidad de guerra, para que no se arrepintieran de su salida. El Todopoderoso los guiaba de día por medio de una columna de nubes y durante la noche, por una columna de fuego.  En su partida de Egipto, Moshé llevó los restos de Iosef.  El pueblo había acampado en Etam, en el extremo del desierto.  Luego Hashem ordenó que regresaran y acamparan frente al Mar Rojo.  Una vez que el pueblo de Israel salió de Egipto, el Faraón arrepentido de habérselo permitido,  decidió perseguirlos armando un fuerte ejército. Cuando los israelitas vieron aproximarse al ejército egipcio, se aterrorizaron y se quejaron a Moshé, ante una posible muerte en medio del desierto.  Pero Moshé le respondió que el Eterno los salvaría de los egipcios y que sería Él quien lucharía por ellos.  Así fue que la columna de nubes se colocó detrás del pueblo y se transformó en un oscuro velo que oscureció a los egipcios.

Moshé extendió su mano sobre el mar y el Eterno envió un fuerte viento que dividió las aguas del mar y lo puso seco. Así los israelitas pudieron cruzar el mar.  Los egipcios los siguieron dentro del mar junto con sus carros y caballos, y se atoraron en la arena húmeda las ruedas.  Nuevamente Moshé extendió su mano y las aguas se cerraron, ahogando a los egipcios y sus animales.

El pueblo entonó una canción triunfante, alabando el poder del Todopoderoso por haber eliminado a los hostiles. 

Durante tres días el pueblo transitó en el desierto sin encontrar agua. Ya con sed, comenzaron a murmurar contra Moshé y en Mará encontraron aguas amargas.  El Eterno mostró un tronco que al ser echado en esas aguas, las endulzó.  Así saciaron su sed y continuaron su marcha hacia Elim, donde había doce fuentes de agua y setenta palmeras.  Allí acamparon. 

El pueblo protestó ante Moshé y Aharón por la falta de comida, añorando lo vivido en Egipto. El Eterno dijo a Moshé que haría llover pan del cielo y que el pueblo lo debía recoger.  Así a la noche hubo carne de codornices y a la mañana siguiente cayó el man (maná), el que tenía el sabor de la comida que cada uno quería degustar.  El man caía todos los días, menos en Shabat, por lo que en el sexto día debían juntar porción doble.  Así fue como comieron durante los cuarenta años de transitar hasta llegar a la tierra prometida.

Acamparon en Refidim y nuevamente, el pueblo reclamó a Moshé por la falta de agua. Hashem le ordenó a Moshé que tomara su vara y golpeara una roca del monte Jorev, y salió agua.  Este lugar fue llamado Masá Merivá.

Y vinieron los amalecitas (la tribu de Amalec) y atacaron a los israelitas y combatieron en Refidim. Moshé pidió a Yehoshúa que eligiera los hombres más fuertes para luchar, y él, Moshé, junto a su hermano Aharón y a Jur, subieron a la cumbre de la colina.  Cuando Moshé alzaba sus manos, Israel dominaba y cuando las bajaba, Amalec dominaba.  Aharón y Jur sostenían alzadas las manos de Moshé, con gran firmeza.  Así, el pueblo judío pudo vencer, derrotando a Amalec.  Hashem ordenó a Moshé instruir a Yehoshúa, sobre la recordación de lo ocurrido.  Por la traición que cometió Amalec al atacar al pueblo de Israel, su tribu debía ser destruida y su recuerdo borrado a través de las generaciones.

Tomado de: mesilot.org

 

NO LLORES

"Vaiehi beshalaj paro..." (y fue cuando el faraón envió...)

Dijeron Jazal, "vaiehi" es una palabra que indica llanto. Alguien se lamentó, gritó y lloró. ¿Quién fue? El faraón. Y se puede mostrar con un ejemplo.

Un rey le pidió a uno de sus allegados que le compre un lindo pez. Este hombre fue, y sin prestar tanta atención, le trajo al rey un pez que despedía un olor tremendo, y no precisamente a pescado. El rey le dijo: tenés tres posibilidades, una, comerte el pescado, la segunda, pagar una fuerte multa, y la tercera, recibir treinta y nueve latigazos...

El hombre pensó un instante: ¿cómo la puedo sacar más barata? Lo mejor es comerme el pescado... Empezó a comer y comer (además de lindo era un pez grande) hasta que comenzó a vomitar. El rey dijo: hasta que no comas todo, inclusive lo que vomitaste, no habrás cumplido con el castigo...

¡Ya no puedo más! Muy bien, dijo el rey, o latigazos o multa...

Y el hombre eligió latigazos (al menos no le costaría dinero). Y empezaron los latigazos: fue el primero, ¡Ay!, fue el segundo, ¡Oy!, después de quince latigazos pidió por favor que se detengan...

¿No podés más?, preguntó el rey, entonces tendrás que pagar la multa... Al final recibió los tres castigos: comió del pez en mal estado, recibió latigazos y pagó la multa...

Y esto es lo mismo que ocurrió con el faraón: Hakadosh Baruj Hu le dijo, "deja salir al pueblo de Israel de Egipto". No quiero, dijo el faraón. ¡Ahh!, ¿no querés? Primero, en la plaga de la sangre, se murieron todos los peces del río, y los egipcios comieron peces en estado de descomposición... ¿Todavía no querés permitir salir a los iehudim de Egipto? ¡No!, no quiero! Entonces fue una plaga tras otra, un golpe tras otro, y cada vez duelen más, pero no quiere saber nada, hasta que recibe la última plaga, la de los primogénitos, y esa fue tremenda, ahí decide "echar" al pueblo de Israel... Pero antes de esta plaga, los iehudim habían tomado todo el dinero de Egipto, Jazal nos dicen que cada iehudi salió de Egipto con noventa burros cargados de oro y plata...

Vemos que el faraón comió el pez, recibió las plagas y también tuvo que pagar... por eso se lamentó y lloró: qué tontería hizo al no dejar salir al pueblo desde un principio.

Jazal nos traen otra causa por la cual el faraón lloró, explicándola con otro ejemplo:

El hijo de un rey salió a pasear y se perdió. Anduvo por los caminos hasta que se topó con un hombre millonario que se lo llevó a su casa. El rey escuchó que su hijo se hallaba en la casa de este hombre, y le mandó una carta: le pido por favor que envíe a mi hijo a casa, desde ya le agradezco mucho todo lo que ha hecho por él desde el momento en que lo encontró perdido...

El hombre le contesta la carta: "no estoy interesado en devolverlo, se quedará conmigo..."

El rey lee asombrado la respuesta y le dice a uno de sus ministros: parece que este hombre necesita escuchar la "voz" del rey. El rey averiguó dónde el hombre le daba de beber a sus rebaños, ¡y cerró el ingreso del agua a ese lugar!

Le envió otra carta para que mande a su hijo de vuelta a casa y recibió otra carta con la misma respuesta. Ahora el rey investigó dónde hacía este hombre a dormir a sus animales, y mandó gente a quemar todos esos lugares.

Otra carta, la misma respuesta, ¿dónde pastorean los animales? El rey hizo quemar todos los campos...

Este hombre no tenía ni como dar de beber ni de comer a sus animales ni tampoco donde hacerlos dormir. Otra carta del rey y otra respuesta, ahora, ¿dónde estudian los hijos? ¡Ohh! Ahora la cosa cambia, ¿van a tocar a mis hijos? Enseguida liberó al hijo del rey. Y después se largó a llorar.

Le preguntaron, ¿ahora llorás? No lloraste ni cuando te cortaron el agua, ni cuando quemaron tus campos ni tus lugares donde dormían los animales. ¿Por qué ahora sí?

¿Saben por qué? Porque todo este tiempo fui una persona importante, me carteaba con el rey, el rey escribía "para el distinguido señor...", firmado: "el rey"!!!

Había cartas y enviados, el remitente de la carta: "el Rey de Reyes, Hakadosh Baruj Hu"..., el destinatario: "el distinguidísimo faraón". Fui una persona muy importante. Enviaba a Moshe a hablar conmigo. Hashem me pedía algo, y yo no aceptaba... Había "diálogo". Ahora que yo liberé al pueblo de Israel, ¿quién va a hablar conmigo? Dejé de ser una persona importante, por eso lloro ahora...

Nosotros tenemos que saber algo muy importante: hay veces que nos toca recibir "golpes", nos vienen problemas, sufrimientos, a todos nos pasa, cada uno con su "pekale", cada uno con su paquete..., y nos quejamos, lloramos, ¿por qué a mí? Pero estamos equivocándonos, lloramos en lugar de decir "gracias", en esos momentos estamos negociando con Hakadosh Baruj Hu, El Habla con nosotros, nos está hablando, ¿y nosotros nos quejamos? Nos quejamos porque a otras personas no les pasa, ellos son menos importantes, con ellos no habla, con nosotros sí!

Contaba el Rav Shaj ztz"l, en nombre de su tío, el Rav Izer Zalmen, que un niño iba paseando con su padre por los campos, y el padre le dice: hijo, tené mucho cuidado, no te distraigas ni te separes de mí, porque podés perderte muy fácilmente... Pero, los chicos son chicos, no piensan, primero el niño ve un animalito y corré detrás, después vio una planta rara y se tiró al piso a verla, hasta... que dejó de ver al padre.
El chico grita: ¡Papá, papá!, y el padre también grita ¡Hijo, ¿dónde estás?!

Se escuchaban pero no se veían, de pronto el hijo siente un "golpe" fuerte en el hombro y grita "aaayyyy!". Se da vuelta y ve que el golpe fue de su papá. Llora, porque le duele, pero está contento, porque "papá está al lado mío!", papá está cerca, aunque a veces duela.

Una persona fue al doctor, y el médico le dice: señor, lo primero "dieta", urgente, nada de azúcar, nada de sal, nada de grasas, nada! Hay que bajar el colesterol...

Otra persona va al mismo doctor, que dice: ah!, así estamos..., y se dirige a la esposa, ¿qué es lo que más le gusta? ¿Una torta de crema y chocolate?, bueno, que la coma..., ¿qué cigarrillos le gusta fumar?, cómpreselos, ¿le gusta comer con mucha sal?, no hay problema.

¿Quién está mejor? El que recibe indicaciones, que le prohíben cosas, que lo controlan, o el que tiene libertad total. Seguro que el que tiene prohibiciones, el otro "no tiene remedio", por eso que disfrute los días que le quedan por vivir... Si nos "golpean" señal de que hay que mejorar, estamos en "tratamiento".

El faraón lloró porque dejó de ser importante, terminaron las cartas, las negociaciones, el pueblo de Israel se fue y Egipto quedó fulminado con la última plaga. Sin embargo, el versículo dice: "...velo najam Elokim..."

Otro ejemplo: secuestraron a los hijos del rey, mataron a algunos de ellos y los que quedaron con vida recibieron una flor de golpiza. El rey prepara inmediatamente su ejército y corre a salvar a los que quedaron con vida. Cuando logra rescatarlos, el jefe del ejército le pregunta al rey: ¿mi señor rey está conforme? Seguro que sí, contesta el rey, ya que pudimos salvar a los hijos que quedaron con vida, pero, todavía no terminó el trabajo..., quedan cuentas pendientes, ¿qué hay con los que murieron?

Hakadosh Baruj Hu sacó al pueblo de Israel de Egipto, castigó duro a los egipcios, pero todavía no terminó, hay todavía deudas. La cuenta es muy complicada y voluminosa. Hay que hacer venir al faraón al agua, hacerlo entrar y no dejarlo salir, ya va a llegar, todo llega...

Sigue contando la perasha: "...vajamushim alu bene Israel meeretz mitzraim". ¿Qué significa vajamushim? Rashi dice que no pudieron preparar la vianda necesaria para salir de viaje por el desierto, y el Tárgum Onkelos dice "apurados". Pero el Tárgum Ionatan ben Uziel dice vajamushim viene de jamesh (cinco), que cada familia salió de Egipto con cinco niños. ¿Cómo puede decir algo así? Todos sabemos que en Egipto las mujeres tenían seis hijos en cada embarazo, ¿cómo van a salir solamente con cinco? Además no tenían un solo embarazo. Algo más, el Tárgum Ierushalmi dice, vajamushim, significa que tenían muchas buenas acciones, ahora entendemos menos, ¿dónde tenían los Bene Israel buenas acciones antes de salir de Egipto?, ¿y este es el significado de la palabra vajamushim? Si Jazal dijeron que cuando Hakadosh Baruj Hu decidió sacar al pueblo de la esclavitud en Egipto buscó buenas acciones y no encontró. Moshé Rabenu y Aharon Hacohen estaban preparados para conducir al pueblo en la salida, pero el pueblo no estaba listo espiritualmente...

Pero, Hashem descubrió la forma de justificar la salida de Egipto, le dio al pueblo de Israel dos preceptos, el sacrificio de Pesaj y el BIT Mila. El primero era por demás peligroso, ya que cada iehudi tenía que sacrificar a uno de los "D-oses" de los egipcios, y esto ponía en peligro sus vidas. Esta "entrega" por el precepto junto con el Brit Mila compondrían las buenas acciones que hacían falta que estuvieran presentes en el pueblo.

La cosa no era fácil. Nadie quería cumplir con estos dos preceptos. Entonces, Hakadosh Baruj Hu le dijo a Moshe, hacéle "shejita" a tu Korban Pesaj... Fue Moshe Rabenu, hizo su sacrificio, y Hashem introdujo "olor" a Gan Eden en el sacrificio de Moshe Rabenu! El aroma se sentía en toda la tierra de Egipto. Jazal dijeron que los iehudim sentían "cansancio" a causa de ese olor, se sentían atraídos, con desesperación. Fueron a ver a Moshé Rabenu y le pidieron un pedazo, que Moshé comparta con ellos...

Ustedes no pueden comer de mi sacrificio, les dijo Moshe, ya que está escrito sobre el Korban Pesaj que quien no tenga hecho el Brit Mila no puede comer de él. Enseguida, todos corrieron, tomaron un cuchillo (o una piedra) y se hicieron el Brit Mila.

A continuación, como cosa ya permitida ahora para ellos, sacrificaron el Korban Pesaj. Así juntaron los dos preceptos, pero qué difícil fue lograrlo.

Sin embargo, como dijimos, el Tárgum Ierushalmi dijo que vajamushim es que tenían muchas buenas acciones. Pregunta el Rav Zalmen Soroskin en nombre de su suegro Rav Eliezer Telser, ¿cuántos chicos tenía cada familia en Egipto?

Un renegado le dijo una vez: Rebe, todo lo que está escrito en la Torá, lo acepto, pero, las explicaciones de los jajamim, "¿seis nacimientos por embarazo?", no lo acepto... Ah, vos decís que aceptás todo lo que está escrito en la Torá, muy bien, dijo el Rav, trae el jumash "Bamidbar", al principio, allí se cuentan todos los hombres de Israel desde los 20 a los 60 años, resultan ser 603550. Después contaron los primogénitos, desde el primer mes de vida en adelante, obtenemos 22300. Si queremos saber cuántos hombres hay en total, ya que antes contamos desde los 20 años, tenemos que decir que por lo menos (podrían ser muchos más, esta es la cantidad mínima) son otros tantos como los hay por encima de 20, o sea, en total, 1207100 hombres, frente a los 22300 primogénitos, resulta de la división que por cada primogénito había otros 54 niños. Le preguntó Rav Eliezer, ¿cuántos partos (promedio) tiene en la vida una mujer? El hombre trató de contestar... ¿Está bien 9? Perfecto, contestó el Rav. Muy bien, para llegar a 54 hijos con 9 partos hace falta que en cada uno la mujer dé a luz 6 bebés..., escrito en la Torá, sin necesidad de Jazal...

Llegamos ahora a que cada familia tenía 54 hijos, no cinco, algo problemático para darles nombres, pero no nos cabe duda que se arreglaron. Jazal dijeron que en la plaga de la oscuridad murieron cuatro de cada cinco iehudim. ¿quiénes murieron?, solamente los malvados, no los niños, los niños no se consideran malvados. O sea, murieron los padres, y quedaron 54 niños "solos" en la casa. ¿Quién los crió? Cada familia tomó los niños que quedaron huérfanos de las otras cuatro familias. ¿Quién más podría ocuparse de ellos? Resulta entonces lo que dijo el Tárgum Ionatan ben Uziel, que cada familia salió con cinco hijos, ¿qué quiere decir con cinco hijos? Quiere decir que cada familia salió con cinco familias de hijos, cada familia salió de Egipto con doscientos setenta chicos, por eso dice el Tárgum Ierushalmi que tenían muchas buenas acciones... ¿Sostener un instituto de huérfanos no son buenas acciones?

Podemos entender ahora cuánto favor hizo Hashem en el desierto al alimentar al pueblo con el "man". Imaginemos lo que hubiera sido para cada familia ocuparse de alimentar 270 hijos! No había almacenes ni panaderías, y en caso que hubiera almacén, había que llevarse todo el almacén a la casa!

  AL AGUA PATO.

Los hijos de Israel salieron de Egipto un día jueves, pasaron Shabat en el desierto y cuando comenzaron a prepararse para continuar viaje, el domingo, llegan los enviados del faraón para anunciarles que pasaron los tres días que habían pedido estar fuera y ahora debían volver a Egipto, quieran o no quieran. Los iehudim les dicen que de ninguna manera piensan en volver, seguirán viaje a la tierra de Israel, pero los egipcios no entienden, entonces hay que hacerles entender. Primero con palabras, después con golpes, varios de los egipcios murieron y otros escaparon para contarle al faraón que los iehudim no tienen en sus mentes la idea de volver...

Hashem, como ya dijimos, castigó muy fuerte a Egipto con las plagas, pero no terminó allí, quedaban cuentas pendientes, ¡y qué cuentas!, por eso está escrito después de la última plaga: "velo najam Elokim".

Había que traer a todos los egipcios, faraón incluido, al mar. Entonces Hashem les ordena a los iehudim que emprendan el camino de regreso. Al partir de Egipto salieron en forma ordenada, a pesar de que cada familia llevaba doscientos setenta niños y noventa burros cargados con los tesoros de Egipto. Una tribu detrás de la otra, primero "Iehuda" y al final "Biniamin". Cuando tienen que girar ciento ochenta grados, lo más sencillo era que cada uno gire y vuelvan hacia atrás, pero Hakadosh Baruj Hu los hace dar vuelta de forma que nuevamente "Iehuda" quede al frente y "Biniamin" atrás, pero como están volviendo, "Biniamin" quedó más cerca del mar que los demás (esto será importante más adelante).

Llegan frente a "Pi Hajirot", que eran dos piedras enormes que estaban "colgando" en el aire desde los seis días de la Creación (de acuerdo a la Mejilta). Estas piedras tenían dibujadas dos caras, una de hombre y otra de mujer. En ese lugar, los egipcios habían puesto un ídolo, al que llamaban "baal tzefon". ¿Pero cómo ese ídolo quedó en pie? Está escrito que no quedó ninguno en Egipto, el que estaba hecho de madera se quemó, el que estaba hecho de piedra se rompió, ¿entonces? Hakadosh Baruj Hu lo dejó en pie especialmente para esta ocasión.

El faraón supo que los iehudim llegaron allí y dijo: vieron, contra otros ídolos pudieron, pero contra este, el más fuerte, nadie puede contra él. ¡Ni siquiera Hakadosh Baruj Hu puede con él!

No existen palabras para describir la falta de cerebro del faraón. ¿Así que Hakadosh Baruj Hu no puede? Ya vas a ver lo que el Bore Olam puede hacer!!!

El faraón vio que los iehudim estaban como atrapados, entonces dijo: "están perdidos en la tierra, el desierto los encerró, volvieron porque baal tzefon los atrapó y no los dejó continuar su camino". Así decidió armar su ejército y salir tras el pueblo de Israel. ¿Y cuál era la finalidad de esta salida? Demostrar a cada egipcio y a todo el mundo que "Yo Soy Hashem", cada egipcio antes de morir sabrá que "Yo Soy Hashem".

El faraón armó seiscientos carros y dice el versículo "sheloshim al kulo", explica la Mejilta que en lugar de que cada carro sea arrastrado por dos caballos, como era la costumbre, ahora los caballos eran tres, para ir más rápido, pero otra opinión dice que no eran tres los caballos sino que por cada iehudi había tres soldados, o sea, un millón ochocientos mil soldados!!! Momento, otra opinión, treinta soldados por cada iehudi, o sea dieciocho millones de soldados, y otra más, trescientos por cada iehudi, en total, ciento ochenta millones de soldados...

No está mal, alcanza con la primera opinión, un millón ochocientos mil soldados, una barbaridad, y Hashem "endureció" el corazón del faraón y persiguieron a los hijos de Israel. Allí estaban, en "Pi Hajirot" frente al baal tzefon y está escrito que "el faraón acercó", ¿qué acercó el faraón? Acercó el corazón de los iehudim al Bore Olam, ¿por qué? Porque al ver el gran ejército temblaron de miedo y comenzaron a rezar y a gritar para que Hashem los salve.

Jazal compararon la situación a una paloma que escapaba de un halcón. Se metió entre unas piedras que dejaban pasar a la paloma pero no al halcón. Pero al entrar se encontró frente a una víbora.

Así estaban los hijos de Israel y Hashem dice: "Quiero escuchar sus voces!!!"

Los sufrimientos no vienen para hacernos sufrir, vienen para que elevemos nuestras voces al Bore Olam y le pidamos que nos ayude, El quiere escucharnos...

Jazal nos dicen que estando frente a los egipcios, veían que no había escapatoria, empezaron a hacer señas, unos a otros, para que los egipcios escuchen: no, no, yo no me escapé, fue él, sí, ese viejito, Moishe, él nos trajo por la fuerza. Sí, parece debilucho pero tiene fuerza, y nos arrastró hasta acá... Yo no quería venir, y él me trajo a la fuerza...

Dijo Hakadosh Baruj Hu: ¿qué son esas señas? ¿los persiguen los caballos? Ya van a ver lo que puede hacer el Bore Olam, no necesitan pasar la culpa a nadie...

Jazal nos dicen que en ese momento había entre el pueblo de Israel cuatro grupos. El primero que decía, estamos perdidos, tirémonos al agua para que no nos maten.

El segundo: no! no nos vamos a tirar, podemos morir ahogados, vamos a pelear contra ellos, o ganamos o perdemos, como máximo podemos morir, vale la pena pelear.

El tercero: ¿para qué pelear? Volvamos a Egipto.

El cuarto grupo: vamos a gritar muy fuerte, para asustarlos ¿? Bueno, si queremos pensar que fuerte pueden gritar doscientos setenta niños en cada familia, el griterío puede ser muy grande!!

Y Hakadosh Baruj Hu tiene una respuesta para cada grupo. Para los que se quieren tirar al mar les dice: NO TENGAN MIEDO! Para los que quieren pelear: ESPEREN Y VERAN LA SALVACION QUE TENDRAN HOY! Al tercero, que pretendían volver: A LOS EGIPCIOS QUE VIERON HOY NO LOS VERAN JAMAS! Y al cuarto grupo que quería gritar: HASHEM PELEARA POR USTEDES, NO TIENEN QUE HACER NADA, Shhhhhhhh, no griten...

Y Hashem le ordena al pueblo de Israel, adelante, avancen hacia el mar..., y vos Moshé, señala con tu mano el mar, y se partirá...

Un renegado se acercó a uno de los grandes rabanim de nuestro pueblo y le dijo: ahora ya sé como Moshé partió el mar. Los científicos descubrieron que hay una piedra que se llama "snaprinon", que rechaza el agua, al acercar esa piedra al agua, el agua se escapa del lugar. Debe ser que el bastón de Moshé estaba hecho de snaprinon y cuando lo dirige hacia el agua, las aguas se hacen a un lado...

El Rav le contesta: no alcanza decir que sos un renegado, además de eso no sabés nada de nada. Moshé Rabenu levantó la "mano", sin el bastón, y por qué hizo así, solamente para que ignorantes como vos intenten dar explicaciones...

Y las aguas se abrieron y el pueblo de Israel entró por lo seco. Hay dos opiniones en el Midrash, una, que cada tribu dijo: yo entro primero. Biniamin dijo yo entro primero. Iehuda gritó, no, esperen (Iehuda estaba último ahora), yo entro primero. Y empezaron a tirarle piedras a Biniamin para que los esperen.

Hakadosh Baruj Hu dijo: tengo la solución para los dos. Por la gran decisión de los dos, el Beit Hamikdash se construirá en las posesiones de ambos...

La segunda opinión del Midrash: todos tenían miedo de entrar al agua, hasta que apareció Najshon ben Aminadav, de la tribu de Iehuda, que entró. Cuando el agua le llegó al cuello, gritó: salvame Hashem, que el agua me llega al alma, y el mar se abrió...

Llegamos a la partición del mar.

Algo asombroso tenemos que explicar. Si los bnei Israel hubieran tenido que caminar sobre el mar, hubiera sido muy difícil, ya que tendrían que "subir" y no olvidemos que estaban con doscientos setenta niños y noventa burros.

En la naturaleza, sabemos que todo lo que se enfría, se comprime, y lo que se calienta, por ende, se agranda. Con todos los materiales salvo con el agua. El agua, al descender la temperatura se comprime hasta los cuatro grados centígrados, si seguimos bajando la temperatura comienza a expandirse, resulta que el hielo ocupa más lugar que el agua, lo que no ocurre con ningún otro material (por eso si llenamos una botella con agua y la ponemos en el congelador, puede reventar).

Por eso, si los iehudim hubieran tenido que caminar por sobre la superficie del mar (congelado) se compararía con atravesar una montaña, en cambio, abrir el mar, para caminar por el lecho habría que descender como a un pozo. Demasiado complicado para una caravana con tantos niños, que además se escapaba de un ejército.

Hakadosh Baruj Hu hizo un milagro (otro más, como si faltaran), hizo agujeros entre el hielo para que los iehudim caminen sin subidas y sin bajadas..., "abismos en el corazón del mar", como está escrito, ¿dónde está el corazón? ¿arriba, abajo? No, en el centro, los iehudim caminaron por el medio del mar. Lo que decimos en la Hagada de Pesaj: si no hubiera partido el mar y no nos hubiera conducido por "adentro"... No solamente eso sino que había doce senderos por los que andaba cada una de las tribus, para que fuera todo un poco más ordenado.

Pero ahora hay otro problema, al andar cada uno por un camino, cada una de las tribus está temiendo por la "suerte" de las demás, ¿dónde están? ¿estarán vivos, se habrán ahogado o los habrán atrapado los egipcios?

Para esto el Bore Olam hizo las paredes transparentes, para que puedan verse unos a otros, pero todavía más, también había "ventanas", para que puedan saludarse...

Una vez, prosiguió el Rav Shlomo Levinstein, dije en una conferencia que había ventanas, y una persona me preguntó de dónde saqué eso. Y no recordaba de dónde, por eso fui a preguntarle el Rav Jaim Kanievsky Shlita, que me dijo que en la "pesikta de rab Kaana" dice: dijo rabi Iojanan, las paredes eran como de vidrio y con ventanas. Dijo Zeraj bat Asher, yo estuve allí y no había ventanas.

En el pirke de rabi Eliezer afirma que allí había ventanas. Y así se preguntaban unos por los otros, y todos estaban tranquilos al saber que sus hermanos estaban bien.

Otro problema tenemos ahora. Todos sabemos que cuando queremos salir con chicos a visitar a algún pariente hay que prepararse muy bien, y también preparar nuestra paciencia.

Papá, ¿cuándo salimos? -A las cuatro. -¿Y qué hora es? -Son las tres. -¿Cuánto falta? -Una hora...

Papá, ¿ya son las cuatro? -No, son las tres y un minuto...

Papáaaaaaaa, ¿qué hora es? -Son las tres y dos minutos!!!!!!

¿Alguien alguna vez escuchó esto? Bueno, al fin son las cuatro. Esperen, antes vayan todos al baño y tomen algo para no tener sed. Entramos todos al auto en orden, todos limpitos, fueron al baño y tomaron algo... No pasaron tres minutos que arrancó el auto:

Papá, tengo sed. Ahora nos ponemos duros: -Te dije antes de salir que tomes algo, no tomaste nada, ahora se terminó... -Papá, tengo sed... Papáaaa... –Ohh...

Paramos en cualquier lugar para comprar una botella de agua, el chico toma un sorbito (o apenas se moja los labios): ya se me pasó la sed!!!!

Todos conocen esto o solamente pasa con mis chicos, preguntó rabi Shlomo...

Ahora imaginemos doscientos setenta niños, caminando en el medio del hielo, mamá, tengo sed, papá, tengo hambre... Dijeron Jazal, la madre extendía la mano, descolgaba una manzana y se la daba a su hijo... Si ahora el hijo tenía sed, las paredes eran de hielo, pero además era agua de mar, ¡salada! La madre extendía la mano y de las paredes caía agua dulce!!! El chico tomaba un poco y decía ya no tengo sed, tiraban el agua hacia la pared y se volvía a convertir en hielo...

Los egipcios vieron esto, y entraron al mar. ¿Para qué? No vieron todos los milagros que Hashem le hizo a los iehudim, ¿para qué tienen que entrar al mar? Todas las plagas que soportaron, ¿quieren más?

En realidad entraron porque vieron que todas las aguas del mundo se dividieron, si sólo el mar se hubiera partido, podían suponer que sería peligroso, pero así no... Así que: entren queridos nomás, entren que no va a pasar nada...

Por empezar, los iehudim caminaban por un sendero plano y seco, los egipcios andaban por el barro, y Hashem hizo que la tierra se caliente hasta el hervor, para recordarles que quisieron castigar a los iehudim quemándolos. Finalmente desistieron porque no quisieron recibir el mismo castigo de parte de Hashem, por eso los castigaron con el agua, haciendo uso de la promesa que el Bore Olam hizo de no traer otro diluvio al mundo. Al mundo no, pero a Egipto sí podía traerlo...

Los caballos comenzaron a "saltar", el piso ardía, y las herraduras de los caballos ardían más, los egipcios saltaban junto con los caballos, y los huesos se rompían!!!

Mucho, pero mucho más podemos contar, sin exagerar, sobre la magnitud de los milagros que Hashem nos hizo, en Egipto y al salir de Egipto, para demostrarnos que Hashem reinó, reina y reinará el mundo, para siempre...

 

Rav Shlomo Levinstein Shelita

http://judaismohoy.com/article.php?article_id=1127&group_id=31


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