03 febrero 2010

Barranquilla: PARASHAT YITRÒ: LISTOS, PREPARADOS. TENEMOS LA TORAH!!!‏

PARASHAT YITRÒ: LISTOS, PREPARADOS. TENEMOS LA TORAH!!!‏
de Asher Amram Ben Avraham Avinu - Wednesday, 3 de February de 2010, 18:57
 
בס"ד


Parashá Itró - Jetró

Libro Shemot / Éxodo (18:1 a 20:23)
Sefaradim Yeshayahu 6:1-13
Ashkenazim Yeshayahu 6:1-13, 7:1-6, 9:5-6


Este Envio de Torah Semanal esta : Dedicado a la Refua shelema
 ( curación completa) de:
 
MARAN HAGAON HARAV YOSEF SHOLOM (BEN JAIA MUSHA) ELYASHIV SHLIT"A.-
Sr. Alberto Girado Lobo 
Sr.Sixto hijo de Juana
Sr. Fabio Camacho
Matitiahu Ben Katerine
Sr.Alfonso Rojas
Avraham Moshe ben Miriam Toba
Netanel Ben Sara
Sebastián Ben Rujama
Sr.Zevulón ben Alicia
Sr Aaron Ben Sara
David Gabriel Ben Farida
Sr Kalman Shamai Ben Dina
Sr Iosef Ben Avraham Avinu
 
Sra Aura Ester bat Jana
Sra Maria Bat Lola
Sra Aylin Bat Olga
Sra. Leah Zehara bat Miriam Sasha
Sra.Rujama Bat Clemencia
Sra.Rina bat Clemencia
Sra.Clemencia bat Tana
Sra.Mayo Bat Tana
Sra.Etelvina bat Tana
Sra Jaya Bat Shira
Sra Maria Barrerio
Sra Mijal ruby Bat Marlen
Sra Hanna Bat Malka
Paula Tzofiah Bat Leah
 
Leiluy Nishmatam ( Elevación de las  Almas) de:

HaRab Jaim  David Ben Shraga Fievel Zukervar  ZT´´L
Harab Amram Horowitz ZT''L
Sr. Miguiel Avila Z''L
Carlos Ben Maria  Z''L
Sr Julio Wasserman Z''L
Iyov Ben Avraham Z''L
 
Hatzlaja beKol Maase Yadenu:
 
Asher Amram  Ben Avraham

* Si desea dedicar este envio de Torah, por la pronta recuparacion de un familiar o un amigo o en recuerdo del alma de algun ser querido, por favor envienos un correo a
comhebrea@gmail.com con el nombre de la persona y el nombre de su Madre.

Horario del Encendido de Velas para SHABAT en Bogotà,Barranquilla y Cali ,Colombia

Bogotá:

Fecha Hora    
Viernes, 05 Febrero, 2010Encendido de velas a las: 17:51
Shabat, 06 Febrero, 2010Shabat concluye: 18:41
  Barranquilla:

Fecha Hora    
Viernes, 05 Febrero, 2010Encendido de velas a las: 17:46
Shabat, 06 Febrero, 2010Shabat concluye: 18:37
  Cali:

Fecha Hora    
Viernes, 05 Febrero, 2010Encendido de velas a las: 18:02
Shabat, 06 Febrero, 2010Shabat concluye: 18:52
 

Honrar al Shabat encendiendo velas 18 minutos antes de la puesta del sol del viernes.Este mandamiento único, confiado a la mujer judía, es rico en significados y contenidos.
Es muy importante saber la hora exacta del encendido de velas, ya que bajo ninguna circunstancia esta permitido encenderlas después de la puesta del sol




Shobabim Tat


Las semanas en las cuales se lee desde la parashá Shemot hasta la de Tetzavé, reciben el nombre de: "Shobabim Tat".
Nombre que se forma con la iniciales de cada una de las parashot: Shemot, Vaerá, Bó, Beshalaj, Itró, Mishpatim, Terumá, Tetzavé.

Desde un punto de visto más profunda, el nombre "Shobabim" insinúa las palabras del Eterno a través del profeta:

"Shubu banim – ¡Volveos, oh hijos rebeldes, y os sanaré de vuestras rebeliones! -Henos aquí; nosotros venimos a Ti, porque Tú eres el Eterno nuestro Elokim."
(Irmiá / Jeremías 3:22)

Y "Tat", son las parashot que se añaden cuando estamos en un año embolismal, con un segundo Adar.
Este nombre, formado por dos letras tet, insinúa las nobles conductas de: Teshuvá y Tefilá, Retorno/Arrepentimiento y Rezo/Plegaria.

Algunas personas muy piadosas durante estas semanas: ayunan los lunes y jueves, incrementan sus plegarias, actos de contrición y la caridad.
Es un tiempo especial para incentivar o comenzar los cambios trascendentes en nuestras vidas, para decidirse a hacerse responsable de la propia vida de una manera más intensa y comprometida con la Torá y los preceptos.

Veamos ahora una pequeña enseñanza de cada parashá de estas semanas:

Shemot: Tefilá

"Los Hijos de Israel gemían a causa de la esclavitud y clamaron a Elokim, y el clamor de ellos a causa de su esclavitud subió a Elokim.Elokim oyó el gemido de ellos y se acordó de Su pacto con Avraham [Abraham], con Itzjac [Isaac] y con Iaacov [Jacob].
Elokim miró a los Hijos de Israel y Elokim comprendió"
(Shemot / Éxodo 2:23-25)

Dirija al Eterno sus plegarias, abra su corazón ante Él y espere con confianza la respuesta que siempre es buena.
 

Vaerá: Reconocimiento del pecado y error

"Entonces el faraón mandó llamar a Moshé [Moisés] y a Aarón y les dijo: -He pecado esta vez. El Eterno es el justo; yo y mi pueblo somos los culpables."
(Shemot / Éxodo 9:27)

Aquel que no se percata de que está yendo por mal camino, no podrá jamás llegar a buen puerto. El primer paso del arrepentimiento, del retorno a la propia esencia espiritual y a Dios, es cuando uno dice: "estoy mal".
 
Bó: Aprender y educar

"Y cuando mañana te pregunte tu hijo diciendo: '¿Qué es esto?', le dirás: 'Con mano poderosa el Eterno nos sacó de Egipto, de la casa de esclavitud."
(Shemot / Éxodo 13:14)

No se puede andar por los caminos del Eterno si no se estudia Torá, pues en ella está el sentido de nuestras vidas.
Y cuando hemos estudiado, también tenemos que enseñar a quien sabe menos que nosotros.
Especialmente a nuestros hijos, pues la fidelidad de la Torá se ha mantenido gracias a la transmisión de padres a hijos, generación tras generación.
 

Beshalaj: Agradecimiento y gozo

"El Eterno es mi fortaleza y mi canción; Él ha sido mi salvación. ¡Éste es mi Elokim! Yo le alabaré. ¡El Elokim de mi padre! A Él ensalzaré."
(Shemot / Éxodo 15:2)

Es un deber estar agradecido por todo lo que el Eterno nos ha brindado, pues el espíritu agradecido es uno que reboza de gozo.
Para el que es sinceramente agradecido, no hay dolor por la ambición no colmada.
 

Itró: Atraer al prójimo a la Luz

"Moshé [Moisés] contó a su suegro todas las cosas que el Eterno había hecho al faraón y a los egipcios a favor de Israel, los contratiempos que habían pasado en el camino, y cómo los había librado el Eterno."
(Shemot / Éxodo 18:8)

Agradecer y alabar al Eterno por nuestras bondades es muy bueno, pero es necesario hacer partícipe a nuestro prójimo de las bondades que el Eterno constantemente nos otorga.
Demos cabida a nuestro hermano en la Luz de la Torá, contémosle acerca de la justicia y la misericordia del Eterno, extendamos una mano al que nos necesita.
Porque el egoísta no es considera como una persona viva, sino solamente como alguien que pasa por la vida con gran vacío existencial.

Mishpatim: Cumplir con los mandamientos

"Asimismo, tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: -Todas las cosas que el Eterno ha dicho, haremos y comprenderemos."
(Shemot / Éxodo 24:7)

El rezo es importante, así mismo lo es el reconocimiento del error.
Lo es estudiar y también agradecer.
Pero la base de la plenitud espiritual se encuentra en el esfuerzo por cuidar y cumplir con los preceptos que Él nos ha dado. Con TODOS aquellos preceptos que podemos cumplir, y que nos corresponde que cumplamos.
 

Terumá: Generosidad y santidad

"Di a los Hijos de Israel que tomen para Mí una ofrenda; de todo hombre cuyo corazón le mueva a hacerlo tomaréis Mi ofrenda… Que Me hagan un santuario, y Yo habitaré dentro de ellos."
(Shemot / Éxodo 25:2-8)

Es nuestro deber abrir nuestra mano, y nuestro corazón, tanto para dedicar de nuestro dinero y esfuerzo para las obras del Eterno, como para ayudar a nuestro prójimo que está necesitado.
Cuando somos auténticamente generosos, cuando damos de lo nuestro sin hacer negociados camuflados, entonces estamos construyendo un verdadero santuario para el Eterno en nuestras vidas.
A través de nuestra generosidad el Eterno "habita en nuestro ser".
 

Tetzavé: Iluminar a nosotros y al mundo

"Tú mandarás a los Hijos de Israel que te traigan aceite de olivas claro y puro para la iluminación, a fin de hacer arder continuamente las lámparas."
(Shemot / Éxodo 27:20)

Debemos hacer que el Eterno sea alabado a través de nuestra conducta.
Que todas nuestras acciones, por medio incluso de las cosas más banales y corrientes, se santifique Su Nombre entre las personas.
Está en nosotros la capacidad de hacer alumbrar la divina llama, es cuestión de quererlo y trabajar por ello.

Estos ocho consejos, si se aplican en las semanas Shobabim Tat, o todo el año, sin dudas que llevan a la persona a un estado de salud espiritual que equilibra también la salud mental, social, emocional y física.
Empecemos ahora, es tiempo propicio para hacerlo…

Tomado de: Serjudio.com

Parashá Itró

Resumen de la Parashá – Itró (Éxodo 18:1 - 20:23)

Mientras Moshé llevaba a cabo su misión en Egipto, su familia regresó a Midián. Ahora que los b´nei Israel estaben en el desierto, el suegro de Moshé, Itró, llevó a su hija Tzipora y a los hijos de aquél a Refidim. Moshé dio la bienvenida a Itró en forma afectuosa y le contó todo lo que HaShem había hecho por los judíos. Su suegro reconoció totalmente el poder de Di-s y Le ofrendó sacrificios. Observando que Moshé estaba sobrecargado de tareas judiciales, Itró le aconsejó que nombrara jueces para ayudarlo y que él se concetrara sólo en los casos más difíciles. Moshé actuó conforme a este sabio consejo e Itró regresó a Midian.

El primer día del tercer mes (Siván) después de su partida de Egipto, los b´nei Israel llegaron al desierto de Sinaí y acamparon frente a la montaña. Moshé se aproximó a ella y oyó la voz del Señor que lo instruía para que recordara al Pueblo cómo El los había liberado de Egipto. Si ellos Le obedecían, se transformarían en "un reino de sacerdotes y una nación santa". Moshé descendió de la montaña y repitió las palabras del Señor a los ancianos y a todo el pueblo. Como una nación unida respondieron todos a una: "Nosotros haremos todo lo que nos ha dicho el Señor". Moshé informó de estas palabras a HaShem y sele comunicó que Di-s aparecería en una densa nube y le hablaría delante de toda la congregación de judíos. De esta forma, nunca se dudaría otra vez de Su divina comisión. El pueblo debía prepararse durante tres días para el gran suceso de la aceptación de la Torá. No debían tocar los límites de la montaña so pena de muerte.

Despues de que transcurrieron esos tres días, el seis de Siván, se produjeron truenos y relámpagos, y una densa nube descendió sobre la montaña. Se oyó el llamado de la trompeta y Moshé llevó al pueblo hasta el pie de la montaña. El monte Sinaí estaba envuelto en humo y el Señor convocó a Moshe a la cima. Luego le ordenó que advirtiera al pueblo que no debía contemplar la Manifestación Divina y Moshé cumplió la orden.

Después llegó el momento supremo de la historia del mundo. La voz del Señor fue oída por todo hombre, mujer y niño, mientras formulaba las bases de la conducta moral y religiosa de todos los tiempos:

1 - Yo soy el Señor, tu Di-s, que te saqué de la tierra de Egipto...

2 - No tendrás otros dioses delante de Mí...

3 - No pronuncies el nombre del Señor, tu Di-s , en vano...

4 - Acuérdate del Shabát para santificarlo...

5 - Honra a tu padre y a tu madre...

6 - No matarás

7 - No cometerás adulterio

8 - No robarás

9 - No levantarás falso testimonio contra tu prójimo

10 - No codiciarás la casa de tu prójimo...

Los judíos estaban atemorizados por todo lo que habían presenciado que se alejaron de la montaña y rogaron a Moshé que les hablara en lugar de HaShem, por temor a morir.

Entonces Moshé se acercó a la densa oscuridad y recibió una serie de leyes. Los primeros cuatro preceptos trataban de aspectos importantes del culto divino: la prohibición de la idolatría, la erección de un altar de tierra para ofrendas de sacrificios, más solo donde HaShem ordenara que se lo construyera con roca no tallada ni modelada con instrumentos de hierro, y la ley que establece que el sacerdote debe ascender al altar por una rampa y no por escalones.


- Extraído del libro "Lilmod ULelamed" de Edit. Yehuda. -

(Con la amable autorización de www.tora.org.ar)

TODOS COMIERON EN IOM HAKIPURIM

Y vineron Aharon y todos los ancianos para comer pan con el suegro de Moshe...(Shemot 18,12)

Pregunta Rashi: ¿dónde estaba Moshe en ese momento? Y contesta: estaba parado atendiendo a todos!

En el libro "Otzarot Tzadikei Ugueonei Hadorot" está escrita en nombre de rabi Mordejai Arie Haleivi Orovich, juez principal de una ciudad, una explicación sobre "es más importante recibir invitados y atenderlos que recibir a la misma Divinidad!"

Y preguntamos: ¿de qué forma recibimos a la Divinidad?, por supuesto, estudiando la Tora y cumpliendo los preceptos. Entonces, ¿dónde está la novedad, y qué queremos decir cuando enunciamos que es más importante recibir invitados que recibir la Divinidad? La intención es enseñarnos que si no nos ocupamos de un precepto tan importante como tener invitados y atenderlos como corresponde, será imposible recibir la Divinidad…

Digamos, solía explicar el Bal Shem Tov ztz"l, que un hombre quiere ahora estudiar Tora, y por cuanto que estudia junto a rabi Ashe y Rabina, está cien por ciento seguro que tendrá el mérito de apegarse a al Bore Olam. Pero, de pronto, llega una persona a su casa, y debe atenderla. La sienta a su lado, le sirve un plato de sopa y quiere hacerlo ingresar en su estudio, hablar con él palabras de Tora. En ese momento descubre que ese hombre está "vacío", sin Tora, y no tiene lo que hablar con él. Sobre esto dijeron Jazal, concluye el Bal Shem Tov, que es más importante atender a los invitados que recibir a la Divinidad, debe dejar su estudio y ocuparse de su invitado!

Son conocidas las palabras de Jazal: si ves un rab que parece un ángel de Hashem, tratá de sacar palabras de Tora de su boca. Y preguntamos: ¿de dónde podemos saber cómo es un ángel, tenemos alguna foto para poder comparar? Los jajamim contestan que los ángeles son seres que están "parados", ya que no pueden avanzar, no pueden crecer en Tora ni elevarse. Tienen un grado de espiritualidad inamovible, en contraposición al hombre, que tiene al "ietzer hara", y por medio de su estudio se fortalece sobre el ietzer y crece y se eleva, y así el hombre se puede acercar cada vez un poco más al Bore Olam.

Tenemos entonces un rab, que sabemos que ahora quiere estudiar más y más, profundizar más y más en sus estudios, pero, de todas formas, para poder llegar a darle un bien a sus alumnos, él deja todo, abandona su estudio tan deseado, y se dedica a enseñarles, para que ellos crezcan en Tora. Este rab pasó a convertirse en un ser que está "parado". Este es el rab que se compara con un ángel de Hakadosh Baruj Hu. Y de un rab como ´éste podemos y debemos aprender.

En cambio, cuando el rab que no tiene tiempo libre para dedicarse a enseñarle a sus alumnos a causa de su estudio y su elevación personal, resulta imposible aprender de él…

Así quedan bien claras las palabras de Rashi, porque Moshe Rabenu bajó del monte en el día de Iom Hakipurim, ese día tan especial, después de permanecer en el monte durante ciento veinte días, y no estuvo ni con rabi Ashe ni con Rabina, sino que estuvo estudiando nada más ni nada menos que con Hakadosh Baruj Hu, con todo Su Honor, y no hablamos sobre cualquier día, sino sobre un día tan sagrado como Iom Hakipurim. ¿Podía Moshe Rabenu alcanzar una altura espiritual más grande que ésta? Imposible, estaba en el punto más alto, desde allí, en esa categoría podía conseguir lo que más quisiera, y elevarse hasta alturas inimaginables…

¿Qué hizo, entonces, Moshe Rabenu? Tomó la enorme decisión de pararse, convertirse en un ser "parado", y pasar a servir a los demás. Fijarse quién recibió su porción y quién todavía no la recibió, ésta es la grandeza de Moshe!

Esto también nos explica lo que dice Rashi más adelante (cap.19 vers.14). La Tora nos dice que Moshe descendió del monte hacia el pueblo, para enseñarnos, aclara Rashi, que cuando Moshe Rabenu baja del monte no se ocupó de ninguna cosa personal, sino que inmediatamente después de descender comenzó a ocuparse de los asuntos del pueblo. Y preguntamos, ¿acaso Moshe tenía asuntos personales de que ocuparse? Desde luego que estamos hablando de ocuparse del Servicio al Creador, de sus obligaciones personales con Hakadosh Baruj Hu, y Moshe Rabenu no se ocupó de esos asuntos tan sagrados que también estaba obligado a cumplir, sino que directo, del monte bajó al pueblo, a preocuparse por las necesidades de los hijos de Israel, para ayudarlos en todo lo que esté a su alcance…

El libro "Likutei Jaim" pregunta, de acuerdo a la opinión que sostiene que Itro se encontró con su yerno después de la entrega de la Tora, ¿cuándo vino Itro?

Sabemos que Moshe Rabenu inmediatamente después de la entrega de la Tora subió al monte Sinai y permaneció allí durante cuarenta días. Bajó el diecisiete de Tamuz y rompió las Tablas, y el día dieciocho volvió a subir para rezar por el perdón, para que Hakadosh Baruj Hu perdone a Su Pueblo, otros cuarenta días hasta Rosh Jodesh Elul. Otra vez sube y otros cuarenta días hasta que recibe las nuevas Tablas y desciende en Iom Hakipurim.

Al día siguiente Itro aconseja a Moshe Rabenu para que coloque jueces que puedan alivianar el tremendo trabajo que tenía Moshe de atender a cada integrante del pueblo en forma personal, y también alivianar la espera que debían soportar quienes tuvieran que formular una pregunta a Moshe Rabenu. Entonces, ¿cuándo Moshe pudo recibir a su suegro y cuándo hicieron el banquete?

El libro "Likutei Marim Shik" nos trae, en nombre del Admur rabi Ioshua Mibelz ztz"l, la respuesta a todas nuestras preguntas.

¿Por qué Moshe Rabenu no se sentó con todos a comer?

Ya explicamos que su grandeza fue ocuparse de servir a todos, pero, hay algo más.

Después de que solamente Moshe Rabenu recibió la Tora, ya que todavía no había tenido tiempo para transmitirla al pueblo, Moshe baja del Cielo con cuarenta días de estudio, otros tantos para pedir perdón, y otros para traer las segundas Tablas de la Ley, exactamente en el día de Iom Hakipurim, como explicó Rashi.

Por eso, diremos que Itro se encuentra con Moshe Rabenu en Iom Hakipurim, y por lo tanto, para Moshe está prohibido comer.

Pero para Aharon Hacohen y los ancianos, que todavía no recibieron la Tora porque no escucharon de la boca de Moshe que hay un precepto que nos obliga a ayunar en Iom Hakipurim, para todos ellos está permitido comer sin problemas.

Solamente Moshe Rabenu, que recibió la Tora directamente de Hakadosh Baruj Hu, tiene sobre sí el precepto de ayunar, y, de paso, debido a su grandeza, se convirtió en el "mozo" del banquete, teniendo el honor de servir a tan importantes invitados…

Leor Haner. Rab Shlomo Levinstein Shlita.




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¿TENEMOS OIDOS EN LAS PIERNAS? 

"Y escuchó Itro..." (Shemot 18,1)

Ni bien comienza la perasha Rashi pregunta: ¿qué fue lo que escuchó Itro para que salga en busca de Moshe?, y él mismo contesta: la partición del mar y la guerra con amalek. Y a esta respuesta repregunta el rab hagaon Iaacov Noiman ztz"l, en su libro "Darje Musar": ¿por qué Rashi no nombra la entrega de la Tora? El milagro del monte Sinai está por encima de cualquier milagro. El Ramban también pregunta, está escrito que Itro escuchó todo lo que Hakadosh Baruj Hu hizo a Moshe y a su pueblo Israel, que los sacó de egipto..., ¿por qué no dice que escuchó lo que hizo a Moshe y a Israel en la entrega de la Tora, una de las más grandes maravillas que Hashem le hizo a Israel en todos los tiempos?

Y cuando la Tora dice que Moshe le contó a su suegro todo lo que Hashem le hizo al faraón y al pueblo egipcio, sobre las plagas y como Israel pudo elevarse sobre egipto, salir de esa tierra y andar por el desierto, entonces Itro dice: "ahora sé, ahora reconozco la grandeza de Hashem...", ¿por qué no le contó sobre la entrega de la Tora?, ¿de dónde Itro sabe que Hashem es verdadero y que Su Tora es verdadera, y que no hay nadie que pueda ocupar Su Lugar?...

Me parece poder contestar, con la pobreza de mi intelecto, prosigue el rab Noiman, de acuerdo al Midrash Raba, perashat Mishpatim: Aquiles le dijo al rey Adrianos: quiero convertirme y ser un integrante del pueblo de Israel.

El rey, sorprendido, le pregunta a su sobrino: ¿no encontraste otro pueblo mejor? Un pueblo al que desprecio tanto, en el que asesiné a tanta gente, ¿qué es lo que viste en ellos para querer convertirte?

Dijo Aquiles: el niño más pequeño ya sabe de que forma Hakadosh Baruj Hu creó el mundo, lo que creó el primer día, lo que creó el segundo. Saben cuantos años transcurrieron desde la Creación y también saben como se mantiene el mundo. Y por sobre todas las cosas, la ley de ellos, la Tora, es verdadera.

El rey jugó su última carta: andá y estudiá la Tora, pero no permitas que te hagan el Brit Mila.

-Eso es imposible, contestó Aquiles, ni siquiera el más sabio de tus sabios, ni siquiera un anciano de cien años puede estudiar la Tora sin circuncidarse, porque así está escrito en el Tehilim de David Hamelej: "...dirás las palabras a Iaacov, leyes y juicios para Israel... y no harás así con los otros pueblos..."

Vemos una regla muy importante, la Tora fue dada para el pueblo de Israel, y los integrantes de otros pueblos no pueden comprenderla en su totalidad. Porque para comprender la Tora en su profundidad no alcanza con la inteligencia, hace falta el alma y la santidad de Israel, inclusive hasta para entender las leyes entre personas (que son las cosas más lógicas).

Por este motivo, Moshe Rabenu no puede contarle a su suegro sobre la entrega de la Tora hasta que se convierta, porque para temas como esos, hace falta el alma de Israel, solamente una vez que se convirtió puede comprender lo que ocurrió en el monte Sinai...

Y hoy en día (el rab Noiman lo dijo hace más de cuarenta años), vemos a nuestros hermanos, lo alenu, que no se comportan como iehudim, que profanan el Shabat, que ingieren comidas prohibidas, y por eso no pueden entender lo que está escrito en la Tora. Pero se jactan como grandes conocedores de nuestros libros sagrados, Tora, Neviim y Ketuvim, y mezclan con su lenguaje versículos de la Tora para hacernos creer que tienen conocimientos y que entienden lo que realmente no entienden...

* * *

Repetimos la pregunta de Rashi: ¿qué escuchó Itro para venir? La partición del mar y la guerra con amalek. Pregunta el Rosh Ieshivat Lomza: ¿no sería mejor mencionar un éxito en lugar de mencionar una guerra? O sea, el milagro de haber vencido a amalek y no el comienzo de una guerra.

Y contesta que el comienzo de esa guerra resulta más asombroso que el milagro que inclina la guerra en favor de Israel. Itro no puede comprender, que después de que todo el mundo supo los milagros que Hakadosh Baruj Hu le hizo al pueblo de Israel, después de que todas las aguas del mundo se separaron para que Israel atraviese el mar por lo seco, después de la muerte de todos los egipcios en el mar, ¿cómo es posible que un pueblo quiera enfrentar en una guerra al pueblo de Israel?, ¿alguien puede cerrar los ojos para no ver que el Bore Olam está del lado de Israel? Esto es lo que escuchó Itro, que un pueblo se atrevió a enfrentar a Israel sabiendo que Hakadosh Baruj Hu está con ellos, y esto es lo que provoca su conversión, la necesidad de alejarse de un pueblo como amalek y de todos los que no piensan como los iehudim.

Y vemos hoy, como muchos de nuestros hermanos también cierran sus ojos (recordemos, estas palabras tienen entre cincuenta y sesenta años), sin ver lo que ocurre a su paso.

Empezando por la educación formal, con sus nefastos resultados a la vista de todos. Una educación que enseña a robar y asesinar, sin culpas, sin cuestionamientos. Y a esos establecimientos "educativos" la mayoría de la gente envía los hijos, y ellos, los padres, se convierten en los culpables en conducir a sus hijos al lugar donde aprenden cómo conducirse en una "cárcel". Llegamos a una época en que la gente mata y se hace matar para profanar el Shabat!!! En Bnei Brak, hace un tiempo, se castigaba con severidad al que amenazaba o pretendía profanar el Shabat. Hoy en día, si alguna persona abandona, lo alenu, su estudio, o si un muchacho deja la Ieshiva, y continúa cuidando el Shabat, tenemos que alegrarnos de ello, porque la influencia de la calle es tan mala, que puede provocar cambios inexplicables (recordemos, no ahora, hace cincuenta años).

En otros tiempos, era posible aprender a temer a Hakadosh Baruj Hu en la calle, de los "Am Haaretz", de la gente más común del pueblo, de los carentes de estudio. Recuerdo mi niñez, nos hace tener envidia el rab Noiman, que en una noche de Shabat, a las tres de la madrugada, fui al Beit Hakneset pensando que lo encontraría vacío. Llegué y comprobé que tendría que buscar lugar para poder sentarme. Había gente leyendo Tehilim, otros estudiaban Guemara, otros Halaja, otros la porción semanal de la Tora. Algunos leían todo el Tehilim antes de comenzar los rezos de la mañana, cada uno según sus posibilidades y conocimientos...

Hoy, ¿necesitamos que nos reprochen nuestros rabanim para empujarnos a estudiar Tora? ¿Para qué? Están a la vista las consecuencias, lo alenu, de no estudiar Tora. Itro, aprendió de amalek, se separó de todos los pueblos y se apegó a Israel, al ver que amalek no puede o no quiere "ver" lo que se ve a simple vista. Hoy vemos como padres, mandan a sus hijos a las cárceles o a las clínicas de rehabilitación contra las drogas!! Y tenemos que sentir hacia ellos solamente piedad y lástima. Ya que no saben lo que significa un Shabat en familia, recitar un rezo como "Vaibarej David..." y proclamar que Hashem alimenta a todo el mundo, ¡cuánta vida tienen esas palabras!

El conductor de un carruaje que transportaba a un anciano se veía agotado. El anciano le sugirió recitar el rezo "Nishmat" para recobrar las fuerzas. El cochero lo intentó una, dos, tres veces y todo seguía igual. Hasta que el anciano la recitó, cuando llegó a las palabras "todos mis huesos hablan...", allí el conductor recobró sus fuerzas!!! ¿Cómo podemos hacer para transmitir este mensaje a nuestros hermanos que están alejados? ¿Cómo explicarles que no hay nada que tenga mejor gusto que el estudio de una hoja de Guemara?

Nosotros, Baruj Hashem, conocemos el "gusto" del estudio de la Tora. Al que estudia no hace falta "empujarlo", el sabor dulce de la Tora le pide más y más. Y sin límite, porque la Tora no tiene límite, ni tampoco el placer de estudiarla, no como el placer material, que además de tener límite, se esfuma al poco tiempo...

Otra vez Rashi: ¿qué escuchó? La partición del mar y la guerra con amalek. Itro tenía siete nombres: Ieter, יתר, porque se agregó una perasha en su nombre. Itro, יתרו, cuando se convirtió y cumplió los preceptos de la Tora, le agregaron una letra más a su nombre...

El Alshij Hakadosh pregunta: ¿cómo la Tora lo llama Itro antes de convertirse? Ese fue el nombre que adquirió al cumplir los preceptos y cuando "escuchó" todavía no se había convertido, todavía no era Itro sino Ieter. Y más pregunta: después de llamarlo con ese nombre especial, Itro, ¿por qué recuerda que es sacerdote de midian, sacerdote de la idolatría? Además también recordamos que es el "suegro de Moshe", y eso ya era sabido desde la perashat Shemot...

El Alshij nos quiere enseñar el camino más simple para conseguir la integridad, para ser una persona completa: escuchar con los oídos.

Al escuchar, el hombre puede inclinar su corazón hacia las palabras de Hashem, hacia el reproche y hacia el estudio. Escuchando la persona puede ir subiendo, escalón tras escalón. Esto es "Y escuchó Itro...", con lo que escuchó inclinó su corazón y vio los milagros que Hashem hizo en egipto, así tuvo el mérito de acercarse a Hakadosh Baruj Hu, a ser una persona íntegra, hasta que la Tora le agregó una letra a su nombre y lo llamó Itro!

Todo el mundo escuchó lo que ocurrió en el mar, como dijo la mujer llamada Rajab a los espías, en el libro de Iehoshua (cap.2). Ella sabía que Hashem dividió el mar y sabía que el pueblo de Israel conquistaría la tierra.

En el Midrash, Shemot Raba, está escrito que todas las aguas del mundo se dividieron en dos. Todos escucharon, así decimos en nuestros rezos, en la porción "Az Iashir Moshe...", escucharon los pelishtim, los reyes de edom, los habitantes de moab y los de knaan... Todos escucharon, ¿y dónde están?, ¿por qué no sintieron nada, por qué no se convirtieron? Inclusive los que no estaban apegados a la idolatría, para ellos sería más fácil inclinarse hacia Hakadosh Baruj Hu. Solamente Itro, a pesar de ser sacerdote de la idolatría, abandonó todo para ampararse bajo la protección de la Divinidad...

¿Por qué solamente Itro? Simplemente porque escuchó, escuchó como se debe escuchar. Todos escucharon, pero se puede escuchar y recibir, llevando las palabras al corazón, o se puede escuchar con los oídos tapados. Y la Tora enfatiza que era el "sacerdote de midian", de la idolatría, para enseñarnos que el escuchar de Itro fue un escuchar muy especial...

Contaban sobre un filósofo que fue a hacerle diversos pedidos al rey. Se arrodilló y cayó sobre las piernas del rey, y así seguía con sus pedidos. Le preguntaron: ¿no sentís vergüenza al hacer así? Y contestó: puede ser, pero yo necesito hablar en los oídos del rey, ¿y qué puedo hacer si este rey tiene sus oídos en las piernas?

Todos los hombres fueron creados con oídos, pero para poder escuchar y sentir, para recibir el mensaje de Hashem necesitamos los oídos del corazón!

Darje Musar.

TOAMDO DE: JUDAISMOHOY.COM


El misterio de la acción y el efecto

En la sección de la Torá denominada Beshalaj se narró la salida triunfal del pueblo de Israel de Egipto, donde habían morado por espacio de 210 años, de los cuales en los últimos 86 años, habían sido sometidos a una dura y cruel esclavitud, siendo obligados a realizar trabajos forzados inhumanos. Pero después de ese lapso Dios inflingió duros golpes a Egipto, y los Hijos de Israel liderados por Moshé emprendieron victoriosos la marcha por el desierto, rumbo a la Tierra Prometida. A continuación, viene la sección denominada Itró, que lleva ese nombre por el suegro de Moshé, que se llamaba así.

Ahora bien, uno reflexiona y se pregunta: ¿Cuál fue el mérito de este hombre para que esta sección de la Torá sea llamada a su nombre? ¿Acaso sólo por ser pariente del máximo mandatario de Israel se ha adjudicado ese derecho?

La respuesta es que Itró se ganó él mismo el mérito de que una sección de la Torá fuere llamada a su nombre. Pues como es sabido Moshé se separó de su suegro cuando el pueblo de Israel aun se encontraba esclavizado en Egipto. Los hebreos estaban completamente dominados por esa nación, y eran humillados, vejados y maltratados. Se encontraban en esas condiciones cuando: "Moshé fue y regresó a Ieter, su suegro, y le dijo: «Por favor, iré y regresaré junto con mis hermanos que están en Egipto, para ver si siguen con vida». E Itró le dijo a Moshé: «Ve en paz» (Éxodo 4:18).

Desde ese momento ya no volvieron a verse. Itró no contempló las diez plagas inflingidas por Dios a Egipto ni la salida victoriosa de Israel, como así el milagro de la partición del mar y el ahogamiento del enemigo; y tampoco había apreciado el extravagante triunfo de Israel contra Amalek. Sólo escuchaba rumores, comentarios de personas que hablaban de ello. Y lo más común es que la gente exagere o distorsione las noticias. Por eso nadie iba al desierto para plegarse a los Hijos de Israel, ya que no había certeza de que lo que se decía fuere verdad. Pero Itró impulsado por su deseo intrínseco de buscar la verdad y su fe, se dirigió al sitio sin importarle abandonar su honorable lugar que poseía dentro de la sociedad en Midián, y sus posesiones. Pues él era allí el sacerdote y las personas lo veneraban. Itró dejó todo lo que poseía y emprendió la marcha al medio del desierto. Como está escrito: "Oyó Itró, sacerdote de Midián, el suegro de Moshé, todo lo que Dios hizo con Moshé y con Israel, su pueblo: que El Eterno había sacado a Israel de Egipto. Itró, suegro de Moshé, tomó a Tzipora, mujer de Moshé, después de que ésta había sido enviada –por Moshé-; y a sus dos hijos, de los cuales el primero se llamaba Gershom, pues dijo «He sido extranjero –ger- en una tierra extraña»; y el otro se llamaba Eliezer, pues «el Dios de mi padre vino en mi ayuda –ezrí- y Él me salvó de la espada del Faraón».
Itró, suegro de Moshé, vino a Moshé con sus hijos y su mujer, al desierto donde estaba acampando allí, junto a la Montaña de Dios. Él le dijo a Moshé: «Yo, tu suegro Itró, he venido hacia ti, con tu mujer y sus dos hijos junto con ella»" (Éxodo 18:1-6).

Un hombre digno y ejemplar

El mérito de este hombre es admirable, cambiaba un sacerdocio idólatra y todos los honores de su lugar de residencia, por la fe en Dios, y el camino que conduce a Él, su Torá.

Este hecho puede apreciarse aludido en la cita mencionada, analizándola minuciosamente.

Observad, el nombre de Itró en su original hebreo está escrito así y este es su valor numérico:

Veamos ahora como se escribe en hebreo: "sacerdote de culto idólatra". Y apreciemos también el valor numérico de esta frase:

Le sumamos el valor intrínseco 1 y resulta: 615 + 1 = 616

Se advierte que Itró era sacerdote de culto idolatra y vino a unirse al campamento de Israel en busca de la Torá. Veamos como se escribe "la Torá" en hebreo y su valor numérico:

Se aprecia que el nombre de Itró coincide exactamente con el valor de "la Torá". Es decir, era sacerdote de culto idolatra y fue en busca de la Torá.

Ahora bien, sabido es que en la Torá hay 10 mandamientos y 613 preceptos asignados a los Hijos de Israel. ¿Cabe suponer que Itró estaba dispuesto a cumplirlos a todos?

Observando su nombre es posible obtener esta información.

Itró se escribe así

La primera letra de su nombre es "Yud"

El valor de Yud es 10. Indica que Itró vino para recibir los 10 mandamientos. Y no sólo eso. Observemos las otras letras que componen su nombre además de la "Yud".

Calculemos el valor numérico de estas letras:

Todo descendiente de Noé, está sujeto al cumplimiento de los siete preceptos universales. Pero Itró vino para recibir 606 preceptos más; ya que 606 + 7 = 613. Y 613 son los preceptos que hay en la Torá asignados a los Hijos de Israel.

Es decir, Itró vino para plegarse a los Hijos de Israel, recibir los 10 mandamientos y cumplir los 613 preceptos (Véase Baal Haturim Éxodo 18:1).



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