EL CLAN DE LA ESTUPIDEZ o la estupidez del clan | |
EL CLAN DE LA ESTUPIDEZ o la estupidez del clan por Rafael T.Perez Youseff Ibrahim, veterano periodista americano nacido en Egipto en su Carta Abierta a los palestinos. Que la estupidez humana es el rasgo del carácter más extendido de todos cuantos hay y tienen cabida en la psique, es un concepto indiscutible, pues frente a un intelecto perfectamente armado siempre habrá una miriada de estúpidos parasitando a la razón e intentando con su manera de actuar y de conducirse, a través siempre de lo simple, la falacia, y la reducción, minar el poder integrador garante de toda libertad de pensamiento y de toda verdad incontrovertible no solo de la historia escrita fuente de evidencias inocultables, sino de la historia que al tiempo presente va plasmándose en las arrugadas y aun blancas páginas de los diarios, de los libros que hoy se escriben, de las enciclopedias y de las hemerotecas impresas o virtuales. Dentro de cien años el mundo de entonces juzgará a los hombres de hoy de la misma forma que los hombres de hoy juzgan a quienes antes vivieron ¿y qué diagnóstico podrán ofrecer en el futuro? que en nuestro tiempo existió un conjunto de seres aborregados dignos de no ser recordados por nada. Que en nuestro tiempo el Clan de la estupidez aglutinó en sus filas en un maridaje del todo imposible a individuos y organizaciones tan dispares y tan diametralmente opuestos en pensamiento como lo son quienes defienden los valores de la izquierda (si es que todavía existen esos valores dentro de la izquierda actual) y quienes defienden absoluta y radicalmente todo lo contrario como lo defienden desde la misoginia más profunda y el más innegable y total desprecio por todo aquello por lo que se suponía que la izquierda luchaba. Les causará verguenza ajena más por la estupidez que no pueden esconder que por la causa que este clan desbaratado de ideas cree que sustenta. Pero no solo la izquierda se ha llenado de mentes estúpidas que se lanzan a realizar y a proferir toda clase de estupideces, lo que no tiene disculpa en individuos que siempre han alardeado de formar parte de lo más granado de la intelectualidad europea, gentes y grupos que en su interin odian a esa izquierda que "estúpidamente" le hace el trabajo más allá del propio feudo en el que depositan diariamente sus pobres excrementos ideológico-religiosos, se han unido a los primeros con un único objetivo, y no es que pretendan ignorar la historia a propósito, sino que la desconocen por su descomunal ignorancia intrínseca, hoy para ser de izquierda ya no es necesario ser un intelectual o alguien medianamente formado intelectualmente, hoy para ser de izquierda solo hace falta ser estúpido. Y las evidencias lo demuestran, van dejando tantas huellas y tan claros rastros de su estupidez que en ese futuro cercano los paleontólogos lo tendrán muy fácil para determinar la capacidad craneal de estos individuos. En lo que concierne a Israel y a la sempiterna maledicencia árabe e islámica contra el pueblo judío, las hemerotecas y las enciclopedias, los partes informativos y todos los archivos documentales existentes les desmienten en sus caras taxativamente pero les da exactamente igual, y les da igual porque el estúpido no actúa movido por la razón sino por la consigna, no por el deseo de justicia sino por el afán de venganza, no por la libertad sino a pesar de ella. Deseo aclarar que respeto profundamente a quienes con toda sinceridad defienden los postulados que le son atribuidos inherentemente a la izquierda, no así a las masas aborregadas de los apriscos que se contentan únicamente con el pienso que reciben de aquellos no tan sinceros y desde luego si tan alejados de todo orden moral y de toda justicia, valedores solo de la consigna y defensores a ultranza, precisamente, de toda suerte de estupideces a las que se abrazan irresponsables. A estos el mundo los juzgará un día por sus infames artes y sus retorcidas formas para luego reírse a carcajadas al comprobar la supina ignorancia a la cual se abandonaron. Hoy son legión, mañana no serán ni un mísero recuerdo, nadie se acordará de estos sino para ejercer el derecho a mofarse de quienes hicieron de la estupidez su única bandera. Como perfectamente sugiere Mikel Buesa presidente del Foro de Ermua, "O en el PSOE hay gente muy clarividente o se han convertido en imbéciles", yo creo que lo segundo sr. Buesa, los hechos así lo están demostrando. En cuanto a ese preclaro e ínclito bellotín llamado zerolo , gay para los más progres, bujarrón o maricón para quienes todavía gustan del verbo de Cervantes en su más castellano uso del cual Don Camilo José Cela no se privaba, su habitual inclinación a sustentar y a apoyar a todos aquellos que, si les dieran la oportunidad lo colgarían del minarete más alto de Riad para escarmiento de todos los de su estofa, decimos que su habitual inclinación a sustentar a los terroristas islámicos se debe sin lugar a dudas al enorme placer que suele sentir toda vez que le dan allí por donde la espalda pierde su nombre. Pues que no se preocupe el tal zerolo que se acerca el día en el que aquellos a quienes tanto defiende no tendrán ninguna compasión ni con él ni con la piara de menguados que al tiempo presente los jalean y regurgitan a diario sus consignas de muerte a Israel, incluso el tal zerolo se hartará, como el resto de españoles que lo secundan en su estupidez, se hartará de ver su trasero invadido alegremente por la espada de Ala. Poco a poco dentro de la comunidad musulmana comienzan tímidamente a surgir voces críticas contra eso que la progresía llama palestina que por cosas de la energía centrípeta afecta de lleno a los botarates que defienden su derecho a renunciar a la vida a cambio de mantener in eterniam la cultura de la muerte en tanto sirva para fastidiar al pueblo judío en Israel y para tocarle las narices a los americanos que dicho sea de paso es el único, solitario y patético objetivo de la izquierda europea en general y de la española en particular, todo lo demás les importa un auténtico bledo. Cuando Cuba sea al fin libre, veremos con que cara la izquierda española se presenta ante los cubanos quienes les reclamarán reparaciones por su vergonzoso apoyo a la dictadura que los viene atormentando desde hace décadas, por poner un ejemplo. ¿De qué estábamos hablando? ah si, de los estúpidos. No redundaremos en lo que ya otros con mejor fortuna y mayor rigor documental han escrito al respecto durante las últimas semanas como los artículos de D.Gustavo Perednik, Lcdo. D.Patricio Brodsky, Esther Shabot, Pilar Rahola, mi amigos Raul Schtudiner y Mario Linovesky, Jon Juaristi, y tantos otros cuyos nombres debo omitir por espacio más no por olvido, sin embargo, debemos recordar algunos puntos que sin los cuales estos estúpidos mantienen en perfecto estado de salud la estupidez de la que tanto hacen gala. Desde que Israel evacuó Gaza, estos palestinos en lugar de aprovechar la única ocasión que le ha brindado la historia para crear ex nihilo, al fin, su ensoñación de estado, se lanzaron a la vorágine del odio, la única que conocen por cuanto que es la única que les ha sido inculcada por los botarates de la izquierda europea e inoculada por los adalides del terror, otros de quienes la historia terminará, lamentando tanta estupidez pero riéndose a carcajadas. Desde la evacuación, en la que Israel abandonó hasta el último centímetro de Gaza, reconocido internacionalmente, estos palestinos no dejaron al pueblo judío descansar una noche en paz ni tener un día tranquilo a causa de los constantes y continuos lanzamientos de cohetes sobre las ciudades ya dentro de las fronteras de Israel, y luego vienen a quejarse de que los aviones israelíes les perturban el sueño ahora que, una vez más estos palestinos pobrecitos ellos, traspasaron la frontera atravesando un túnel excavado para tal provocación atacaron una base, asesinaron a dos soldados israelíes y secuestraron a un tercero. Y exactamente lo mismo en el norte con ese partido que dicen que es de dios (¿?) con la diferencia de que Israel y El Líbano no tenían ni tienen conflicto territorial alguno, luego como bien señalan los expertos ese partido de dios (¿?) provocó un casus belli flagrante con lo que Israel esta legitimado por las leyes internacionales no solo a defenderse sino a destruir al enemigo quien, irresponsablemente se pasó por el arco del triunfo toda ley internacional al respecto y el derecho de Israel a vivir en paz. Y aquí entra la estupidez de la izquierda y se posiciona del lado del agresor vilipendiando a Israel, claro estamos hablando de la izquierda española, porque la europea ha demostrado tener un poco más de sentido común, poco, pero algo más que la izquierda española que tantas lumbreras está dando al mundo y si no vean algunas de las joyas intelectuales y de sus dotes diplomáticas y de buen gobierno del presidente español Zetapeta . No es de extrañar que España actualmente sea el hazme reír de toda Europa donde en los círculos de política internacional se comenta que España, Es pa' Ala. Algo ha de haber para que los del partido de dios (¿?) manifiestamente terroristas islámicos de la peor especie y tenidos como tales por toda la UE encuentren en el socialista presidente español al amiguete que andaban buscando para tener un inmejorable campo de entrenamiento terrorista con vistas a conquistar Eurabia. Curiosa pero lamentable relación la que mantiene el gobierno socialista español con su iluminado presidente a la cabeza (¿cabeza?)que confundió con su laica y republicana visión el rosario que recientemente le regaló, a su señora, el papa Benedicto XVI con un collar de perlas. Lamentable relación porque está llamada al fracaso y a la ruina, un presidente naif, rojo y ateo como se proclama que ha debido ser contagiado por el virus panarábico moratiniano ya que al igual que sus homólogos palestinos que en lugar de construir y dar imagen de estado aprovechan todas las oportunidades que tienen para hacer justo lo que denuncia Youseff Ibrahim en su carta abierta a estos, destruirlo. La estupidez, es pues, el solitario rasgo que los identifica sobre cualquier otro, y a este se entregan con la fruición del vicioso, es tal el peligro existencial que emana de un individuo estúpido que se han establecido cinco leyes fundamentales sobre la estupidez humana, si bien nos centraremos exclusivamente en la tercera, cuarta y quinta: La Tercera Ley Fundamental: " Una persona estúpida es una persona que causa daño a otra o grupo de personas sin obtener, al mismo tiempo, un provecho para sí, o incluso obteniendo un perjuicio". La Cuarta Ley Fundamental: " Las personas no estúpidas subestiman siempre el potencial nocivo de las personas estúpidas. Los no estúpidos, en especial, olvidan constantemente que en cualquier momento y lugar, y en cualquier circunstancia tratar y/o asociarse con individuos estúpidos se manifiesta infaliblemente como un costosísimo error". La Quinta Ley Fundamental: " La persona estúpida es el tipo de persona más peligroso que existe. El estúpido es más peligroso que el malvado". De esta manera y ateniéndonos a las conclusiones que expone Youseff Ibrahim en su carta abierta a los palestinos podemos extraer nuestras propias conclusiones, los palestinos y todos aquellos que desde la izquierda los sustentan si, pero, sin advertirles a la vez del peligro que representan para sí mismos y para los demás sus políticas ejecutoras, sus acciones terroristas, su ideología del exterminio y su incultura del odio son, en definitiva, tan estúpidos como los otros y consecuentemente igualmente peligrosos. Basándonos en esta premisa llegamos al convencimiento de que cada ser humano del planeta pertenece a una de estas cuatro categorías, los hay que podemos catalogarlos en las siguientes clases, como incautos, como inteligentes, como malvados y, por supuesto, como estúpidos. Poco que decir sobre los considerados incautos, estos son aquellos que son capaces de hacer algo de lo que ellos mismos no obtendrán un beneficio pero de su acción errónea o impensada los demás sí obtienen alguna ganancia. Los del tipo inteligente serán aquellos de cuyas acciones todos pueden obtener un provecho, incluidos ellos mismos desde luego. La virtud del inteligente es que a diferencia del incauto toda realización y toda acción es resultado de su inteligencia y de una manera de actuar inteligente. La tercera categoría pertenece al ámbito del malvado, el malvado es aquel cuyas acciones causarán a otros graves consecuencias y problemas de complicada resolución, sin embargo, el malvado habrá logrado obtener una ganancia o un beneficio a costa de arruinarle la vida al que tiene al lado. Existen dos subespecies en esta categoría, el malvado perfecto que actúa con una inteligencia perversa y que logra un beneficio para sí mismo equivalente a la desgracia que causa a los demás, y el malvado imperfecto, el individuo que es capaz de provocar un daño tan grande y tan incontrolado que incluso le afecta de lleno, si bien no le importa lo más mínimo, es el tipo de persona que deseará sacarse un ojo con tal de que su vecino se quede ciego. Obviamente roza la estupidez en grado sumo. Finalmente el individuo estúpido cierra estas cinco categorías, el estúpido es capaz de generar caos y ruina allí por donde pasa, sus acciones son siempre inconvenientes, nunca obtienen beneficio alguno de ellas y se sienten felices arruinando su vida si así consiguen arruinar la de los que viven a su lado o tienen la desgracia de cruzarse en su camino. El estúpido actúa irresponsablemente hasta consigo mismo, capaz de toda suerte de "estupideces" es, sin embargo, incapaz de aprender o construir nada o de formarse intelectual y culturalmente, el estúpido solo vive para la afrenta y para la consigna. No necesita esforzarse por nada si puede obtenerlo todo mediante mentiras, robos y fraudes intelectuales, a pesar de lo cual todo lo obtenido terminará indefectiblemente en el cubo de la basura ya que su propia idiosincrasia le impide encontrar un sentido y un uso a todo cuanto le rodea. Si puede provocar un caos, no lo duden, el estúpido lo provocará. La conclusión es que el estúpido goza perseverando en su estupidez, no importa si no obtiene beneficio alguno causando toda clase de males, daños o pérdidas, de hecho es a lo que el estúpido se dedica fervientemente, y si en esta tesitura este se ve afectado estaríamos frente a un auténtico superestúpido. La capacidad de influencia del tipo estúpido puede afectar no solo a individuos aislados sino a comunidades enteras e incluso a naciones si se les deja la menor ocasión para hacer propaganda. Si el estúpido, además, ostenta algún cargo importante en una sociedad, podemos estar seguros que tal sociedad se irá al garete. De ahí su potencial de peligrosidad puesto que podemos llegar a comprender racionalmente que mueve al malvado a ser como es puesto que el malvado actúa siempre con cierta racionalidad, maligna si, pero cierto grado primitivo de racionalidad, la ventaja sobre los estúpidos es que los actos del malvado pueden preverse, son previsibles. Mientras que con el individuo estúpido no funciona ninguna regla racional, sus hechos son irracionales, carecen de sentido y consecuentemente sus actos son imprevisibles, si lo tenemos cerca lo mejor es procurar mantenerlo bajo estrecha vigilancia y si fuera posible procurar su lejanía, cuanto más lejos mejor. Puesto que las acciones de una persona estúpida no se ajustan a las reglas de la racionalidad, de ello se deriva que generalmente el ataque nos coge por sorpresa incluso cuando se tiene conocimiento del ataque no es posible organizar una defensa racional, porque el ataque, en sí mismo carece de cualquier tipo de estructura racional. Existe una notable diferencia entre las cuatro primeras categorías arriba citadas y la quinta, tanto el tipo incauto así como el inteligente y el malvado, estos saben que lo son y actúan conforme a un índice de racionalidad medible y perfectamente ordenado racionalmente, mientras que el estúpido no sabe que lo es, de hecho el individuo estúpido vive convencido de que los estúpidos son los demás. Esta característica concede al estúpido, por naturaleza, la incapacidad para ver la realidad tal cual es y perentoriamente necesita inventar una realidad virtual donde se siente mucho más cómodo y en la cual se refugia. Uno de los rasgos que identifican al estúpido es una sonrisa congelada, sonreír mientras perpetra su delito, éste en el supuesto de un individuo con autoridad manifiesta pues existe el tipo huraño y agresivo que procura ocultarse de las miradas ajenas para poder así cometer sus desmanes sin ser perturbado demasiado, no obstante ninguno de los dos tipos manifiesta remordimiento por el daño causado. Un país cuyo número de individuos estúpidos supere a los de tipo inteligente, es un país que camina por la senda de su defenestración política y social, si se deja a los estúpidos gobernar un país o a estos en masa expresar permisivamente sus acciones y consignas estúpidas ese país, esa sociedad, esa civilización, en el caso occidental, tiene los días contados. Poco se puede hacer cuando es la estupidez humana la que se extiende por el planeta cual manto de incertidumbre y sombra de soledad, como rasgo de estupidez, la consigna, si es contra Israel, la mentira. Israel no es un pueblo inventado por los "imperialistas" para "colonizar" oriente medio y robarles el petróleo a los pobres ricos países árabes como manifiestan desde la izquierda y con la más abrumadora estupidez sus corifeos más destacados, sí, con la más abrumadora, profunda e insolente estupidez y sin expresar el menor signo de corrección intelectual mucho menos pedirles algo de cultura. Israel es un pueblo con tres mil años de historia mientras que esos a los que llaman palestinos por concederles algo se les podría conceder siquiera unos exiguos 60 años de existencia, si bien documentalmente ni eso. Así pues, Israel cuando menos tiene el derecho a vivir justamente en la tierra que históricamente le es propia . Si la izquierda lucha por la autodeterminación y la libertad de los pueblos, entonces ningún otro tiene más derecho a vivir en paz y en libertad en su propia tierra como el pueblo judío en Israel. Defender otra cosa no es defender la justicia y mucho menos la verdad histórica la cual es irrenunciable a efectos de derecho, como es irrenunciable el derecho de Israel a defenderse de las agresiones constantes y continuas a las que ha sido y es sometido el pueblo judío. El mismo derecho, cuando menos, que Rusia a terminar con el terrorismo en su suelo, el mismo que llevó a Europa a defenderse del nazismo y de todas aquellas ideologías totalitarias que buscaron ahogar el grito de libertad, el mismo derecho de todos y cada uno de los pueblos de la tierra cuando todos y cada uno han sido agredidos no por un ideal de paz, justicia y libertad sino por la ideología del exterminio, del odio religioso y/o político, y por el sombrío impulso de la incultura de la muerte. Cuando los europeos estén todos rezando hacia la Meca, en Israel todavía estarán luchando por su libertad, la misma libertad que los europeos, estúpidamente, están negándole hoy al pueblo judío como un derecho inalienable del que al fin podrá Israel disfrutar mientras que para otros será un recuerdo vago de un pasado mejor. Rafael T.Perez -Ratom- 19 julio 2006 http://www.kolisraelorg.net |
23 julio 2006
Kolót: EL CLAN DE LA ESTUPIDEZ o la estupidez del clan
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario