Parashát VaEtjanán, por Rav Daniel Oppenheimer - No Duerme, Quien Vela por Israel de EduPlanet Rectorate (daniEl I. Ginerman) - Wednesday, 2 August 2006, 10:25 PM | |
Parashát VaEtjanán NO DUERME QUIEN VELA POR ISRAEL por Rav Daniel Oppenheimer A través de nuestra larga historia, hemos conocido toda clase de circunstancias y condiciones. Los judíos hemos deambulado en nuestro extenso exilio por todos los países, y hemos tenido que cambiar nuestro domicilio infinidad de veces. Uno de los fenómenos más singulares dentro de este estado de cosas, fue el hecho de que, a pesar de ser perseguidos y modificar su entorno continuamente, los maestros de la Torá se ocuparon de revitalizar el estudio en cada nuevo lugar al que llegaron. En muchos casos, la situación espiritual era tan precaria, que parecía como si la vela de Israel se estuviera por extinguir. Sin embargo, los Sabios de todas las épocas, fueron asistidos por el Todopoderoso, para poder guiar al pueblo, brindarle enseñanza, inspirarle fuerza y energía, y seguir adelante con una vida inmersa en la observancia de las Mitzvot. Cuando uno abre los libros sagrados de estudio - tales como los comentarios sobre el Talmud - que fueron escritos en cualquier época histórica del Galut (destierro), uno percibe las prioridades que tuvieron presente los estudiosos de todos los tiempos. Ellos no se dedicaron a narrar la historia que vivían, ni tampoco destinaron demasiado tiempo a contarnos sus penas y sufrimientos. Solamente se desvelaron por el futuro y la continuidad de Am Israel. Por otro lado, cuando los judíos no se ocuparon de profundizar y transmitir la Torá, la cuenta regresiva de la extinción de esa comunidad, ya estaba en marcha. Una de las instancias más relevantes que modificó el curso de la historia de manera totalmente inesperada y del mapa de la Torá, ocurrió hace más de mil años (aprox. en el 960 de la era común). En el ocaso de la preeminencia de las Ieshivot de Bavel, Ds preparó las semillas de lo que sería el mundo del estudio en las futuras comunidades medulares de Israel. ¿Cómo sucedió esto? Volvamos un poco atrás en la historia. Desde la época del Talmud Bavlí (el que se estudia más asiduamente, y concluida su recopilación en el siglo V de la era común), y hasta aproximadamente el siglo X, todos los grandes Sabios de la Torá, estaban concentrados en las distintas ciudades de Babilonia - principalmente en donde estuvieron las Ieshivot más importantes: Sura y Pumbedita. Los Sabios que vivieron después de la época de los Amoraim (autores el Talmud) fueron llamados Rabanan Savorai, y a ellos les sucedieron los Gueonim (Roshei Ieshivá de estas centrales Ieshivot). El nombre "Gaón", no se refirió a cualquiera de los Sabios, sino solamente a aquellos que estaban íntegramente versados en toda la sabiduría de la Torá. La tradición babilónica se habría plasmado mediante la existencia de fuertes nexos de dependencia del resto de las comunidades de África y Europa con el centro babilónico (p.ej. el envío de preguntas (Responsas) en materias religiosas y de dinero al Resh Galuta (Exilarca) y a los Gueonim para su subsistencia. La existencia de líderes judíos en las diferentes comunidades israelitas de los países que profesaban el Islam, se encontraron a la sombra del liderazgo babilónico. En el plano religioso eran las Ieshivot de Babilonia y la persona de sus líderes, los Gueonim, los que tenían la última palabra en materia de Halajá sobre comunidades tan distantes como las de la España musulmana. Los Gueonim de las últimas generaciones tuvieron que cargar con la lucha contra la herejía en boga en su época: la de los Karaítas. Estos surgieron alrededor del año 760, como resultado de una pelea de hermanos entre los hijos de un fallecido Resh Galuta (Shlomó). El Mayor de ellos, Anán, especulaba con suceder a su padre, y cuando fue soslayado por ser su hermano menor más idóneo para el cargo, llevó a cabo esta escisión a la que le dio un sesgo religioso para justificarse. Lo más grave de esta corriente era que cuestionaba la autoridad de la transmisión oral de la Torá, convirtiéndose así progresivamente en un ente separado de Israel, que al final se fue auto-consumiendo hasta prácticamente desaparecer. Sin embargo, en sus albores, la base de sus dogmas no se veían tan claramente diferentes a las obligaciones de la Torá, razón por la cual mucha gente - como sucedió en tantas circunstancias similares - molesta por alguna condición particular, se fue sumando al nuevo movimiento a pesar que éste descreía de las bases del judaísmo. Durante todo este período los Sabios de Israel fueron profundizando en el estudio del Talmud, y fueron escritas varias obras de gran importancia, entre las más famosas de ellas: 1. Halajot Guedolot: Una de las más tempranas codificaciones de las leyes del Talmud. La mayoría de las autoridades suponen que este trabajo anónimo fue escrito por Rabí Shimón Kaiará, un estudioso de Botzrá en Babilonia, alrededor del año 750. 2. Halajot Pesukot: obra de Rabí Iehudái Gaon (fall. 763) 3. Sefer Hasheiltot: Uno de los primeros códigos de ley judía, basado en la Torá, escrito por Rab Ajái Gaón. El autor fue uno de los líderes de la Ieshivá de Pumbedita durante este período. (fall. 858) 4. Sidur (orden) de Tefilá: enviado por Rav Amram Gaón (fall. 876) a pedido de una de las comunidades del exilio. 5. Aruj: Dada la rápida expansión del imperio musulmán, que ya había llegado a ocupar la península ibérica, el idioma arameo del Talmud que había sido el más habitual entre los judíos, cayó en desuso frente al árabe. Fue ahí cuando R. Tzemaj ben Poltoi (fall. 890) redactó el primer diccionario de la terminología talmúdica. Una segunda y más famosa versión del Aruj, fue compuesta por Rav Natan ben Iejiel de Roma, un contemporáneo de Rashí. 6. Emunot VeDeot: Esta importante obra versa sobre ética, moral y filosofía de la Torá. Fue escrito por Rabenu Saadiá Gaón, nacido en Egipto (fall. 942), Rosh Ieshivá de Sura y una de las figuras más relevantes de la época de los Gueonim. 7. Carta de la historia: enviada por Rav Shrira Gaón (fall. 1003) a la comunidad de Kairouan en la que describe cómo se produjo la transmisión oral de la Tora de una generación a la próxima en las épocas pasadas. El último de los Gueonim fue Rav Hai Gaón (fall. 1040). De él han sobrevivido más respuestas enviadas a interrogantes planteados, que de sus predecesores. A pesar de que hasta ese momento todos los Sabios estaban concentrados en las ciudades de Babilonia, como recordamos antes, un día ocurrió algo que provocó que ese centro de Torá empiece a desplazarse hacia otros horizontes. Cuatro grandes sabios de aquella generación se embarcaron en Bari, Italia, hacia tierras lejanas para recolectar dinero de la comunidad judía que vivía fuera de Babilonia, para la Mitzvá de Hajnasat Kalá (ayudar a parejas que debían casarse pero carecían de medios económicos). Pero todo no fue como había sido planeado: el barco en el cual se habían embarcado fue capturado por piratas de la flota musulmana del califa de Cordova Abd-al-Rahman III, y ellos fueron vendidos como cautivos. Rabí Shemariá ben Eljanan fue vendido en Egipto, y después de ser rescatado fundó una Ieshivá en la ciudad de Alejandría. Rabí Jushiel (el padre de Rabenu Jananel cuyas glosas -basadas en gran medida en las enseñanzas de Rav Hai Gaón- se imprimen junto a nuestras ediciones actuales del Talmud) fue vendido en Kairouan (Túnez) en la que también fundó una Ieshivá. Años más tarde, el famoso R. Itzjak Al-Fasi (Rif) estudió allí. Rabí Moshé ben Janoj, y su hijo Janoj fueron vendidos en España donde fueron rescatados por la comunidad de la ciudad de Cordova (presumiblemente por Hisdai ibn Shaprut <http://www.jewishgates.com/file.asp?File_ID=328>). Si bien de un principio residió allí sin permitir que se conozca su erudición, finalmente fue descubierto y estableció una Ieshivá allí. La ciudad de Cordova sufrió varias embestidas de grupos fanáticos musulmanes que luchaban entre sí. Muchos años más tarde, Rabí Maimón ben Iosef, padre del Rambam, fue el juez principal de Cordova.. No se conoce la identidad del cuarto rabino cautivo. Por razones políticas y peleas internas, el califato de Bagdad fue perdiendo fuerza, y recurrió a pesados impuestos sobre la comunidad judía local, que en consecuencia fue debilitándose. De ese modo, cayó la influencia de las Ieshivot de Bavel. A partir de ese momento se dispersaron las fuentes de Torá por todo el mundo, y el distanciamiento geográfico entre ellas provocó que existan diferencias en las costumbres de las distintas comunidades, en la forma de estudiar la Torá, y en la forma de codificar las secciones legales del Talmud. Las distintas comunidades que mencionamos no tuvieron la misma suerte con el correr del tiempo. Sin embargo, desde una perspectiva histórica, los eventos de aquel momento permitieron que la Torá se difunda a través de los centros judíos del mundo conocido en aquel momento. El exilio fue muy duro, pero el consuelo radica en que aun en lo que parecían ser las peores situaciones, jamás estuvimos solos. No duerme, quien vela por Israel. |
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